EL DESORDEN MATA… Por Nelson Jorge Mosco Castellano

0
88

Dos veces en su discurso de presentación del Presupuesto ante el Congreso apeló

Javier Milei a frases atribuidas a Marco Tulio Cicerón, uno de los más grandes

oradores de la historia y cónsul de la República Romana: “Para finalizar, quiero

citar nuevamente a Marco Tulio Cicerón, el gran legislador romano, que decía: ‘El

presupuesto debe equilibrarse, el tesoro debe ser aprovisionado, la deuda

pública debe ser disminuida, la arrogancia de los funcionarios públicos debe ser

moderada y controlada, y la ayuda a otros países debe eliminarse. Para que

Roma no vaya a la bancarrota, la gente debe aprender nuevamente a trabajar en

lugar de vivir a costa del Estado’.

La completó con un dardo directo al bloque kirchnerista: “Por cierto: Ustedes de

eso no aprendieron nada” cuyo gobierno dejó a la República Argentina privilegiada

en recursos naturales en la indigna pobreza superior al 50% de su población y una

inflación anualizada del 17.000%.

La Universidad de Oxford la incluyó en un tomo de “Citas esenciales”, aclarando

que la frase en cuestión derivaría de una novela histórica: “La columna de hierro”

de Taylor Caldwell, en que atribuye esas ideas al personaje. “Antonio confundía a

Cicerón con frecuencia. Antonio estaba de acuerdo con él en que se debía

equilibrar el presupuesto, que se debía reabastecer el Tesoro, que se debía reducir

la deuda pública, que se debía moderar y controlar la arrogancia de los generales,

que se debía reducir la ayuda a los países extranjeros para evitar que Roma se

declarara en quiebra, que se debía obligar a las masas a trabajar y no depender del

gobierno para subsistir, y que se debía poner en práctica la prudencia y la

frugalidad lo antes posible”.

Tampoco existe certeza respecto de que Cicerón haya pronunciado la otra frase

que le atribuyó Milei: “Cuanto más se acerca el colapso de un imperio, más

estúpidas son sus leyes”. La duda principal sobre su veracidad es que Cicerón vivió

y murió durante la era de la República, anterior al “imperio” al que alude la

oración.

No obstante, la tarea de reconstrucción cultural y económica de la Argentina es de

tamaño ciclópeo. Requiere cirugía mayor presupuestal, orden estricto en el gasto

público y focalizar la ayuda social a ese conglomerado de pobreza que amortigüe

los efectos del proceso recesivo previo a la reactivación económica.

Los argentinos corrigieron el rumbo. Asumen con hidalguía las consecuencias

inevitables luego del colapso de políticas populistas, corrupción generalizada que

incorporaba al asistencialismo como sistema de apropiación de recursos del

Estado, una Justicia trabada en su ejecución tempestiva de los corruptos. Convirtieron al Estado en un coto de caza de enriquecimiento personal obsceno

que inficionó desde el presidente a todo el sistema ministerial, gobernadores e

intendentes. Estulticia que generalizó la inmoralidad del poder usado arteramente

en abuso del pueblo.

La codicia prebendaria asoció delincuentes con cohechadores; soborno como

parte del precio público que sumaba la pérdida diaria del poder adquisitivo que

pagaban los administrados. Todo encubierto por falsos subsidios y engañoso

asistencialismo. Nuestro hermano pueblo argentino llora las desgracias de haber

elegido mal a sus gobernantes. Haber entregado el poder a quienes lo utilizaron

para robar.

Al borde del abismo surgió la esperanza de ordenar el gasto público: dar la batalla

cultural contra un sindicalismo voraz en enriquecerse, cómplice del estupro feroz

para defender privilegios del poder; dirigentes piqueteros con banderas de

izquierda robando a los pobres; empresarios prebendarios rapiñeros de la mano

con la política; mafia narco que financia al sistema y con impunidad asola a los más

débiles.

Costará sangre, sudor y lágrimas inmerecidas para muchos ordenar el desastre.

Como costó 130 mil muertos la desidia demagógica que los usó para mejorar

encuestas alargando el claustro de la pandemia.

El desorden político ideológico mata.

DEJA UNA RESPUESTA

Semanario ConTexto promueve el respeto entre las personas, y fomenta los valores Éticos y Morales de una buena convivencia. La redacción bloqueará los mensajes con palabras o expresiones ofensivas, denigrantes o insultantes. Por un Uruguay mejor. Gracias por tus comentarios

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí