El célebre ex vicepresidente de la República, Raúl Sendic Jr, tal vez, podría estar en el lugar de Orsi actualmente, ya que era el “pollo” de Mujica y Lucía, pero sus travesuras con la tarjeta corporativa y con su título de Genético, solo visto por Topolansky y que nunca apareció, lo dejaron fuera de la carrera política, hoy como próspero empresario.
Pero, no todo lo que don Raúl pensó o dijo, fue malo, ya que dos frases quedaron grabadas para la posteridad y el Frente Amplio, bien que las capitalizó, como parte de una identidad que repiten, instalan y por ende la militancia cree y defiende.
Aquel repetido eslogan “si es de izquierda no es corrupto, y si es corrupto, no es de izquierda”, ha sido adaptado por el Frente Amplio, el que no deja de insertarlo en todo discurso, o cartelería propia, identificándose con el mismo, presumiendo y haciendo gala de que es una condición que los adorna.
Su paso por el gobierno, ha dejado al descubierto todo lo contrario, cuando negocios turbios, procesamientos de figuras relevantes, comenzando por el mismo Sendic, cuando era el vicepresidente, solo desbaratan esa frase vanidosa e irreal.
Pero además, don Raúl, aquel que Tabaré pedía no le hicieran bulling y una semana después lo remató, estampó otra frase para la historia, cuando en vísperas de elecciones departamentales, disparó, “en Montevideo, ponemos una heladera y ganamos igual”.
Y sin duda, debe de haber sido, de las cosas más ciertas, que Sendic nos dijo, dentro de todas las mentiras que descubrimos, como que teníamos petróleo, un título de experto en genética, el agujero super millonario de Ancap, los negocios con Trafigura, etc.
Así, Ana Olivera la tuvimos 5 años en Montevideo, con un pasaje inocuo, pero en verdad aquella “heladera” terminó triunfando.
Aterrizando entonces, en esta campaña a punto de finalizar, tenemos al Frente Amplio, con el nuevo “pollo” de Mujica, a quien se le ha preparado el terreno, para dejarlo de cara a una posible victoria como presidente de la República.
Alguien que no es capaz de resistir entrevistas, donde se le hagan ciertas preguntas, para las cuales no tiene respuestas seguras, es todo un mar de dudas e incertidumbres, que el resto de sus acompañantes cercanos, terminan por explicar, que quiso o debería haber dicho, ya que el entrevero ocasionado deja a todo el mundo con el signo de interrogación.
Conocidos periodistas, así como sus programas, donde concurren los otros candidatos, reclaman por Orsi, que no concede entrevistas, yendo a otros lugares, donde con seguridad, la tribuna que le espera es aliada y con temas no incómodos para Yamandú.
Mientras tanto, el Frente prepara el terreno, descargando su arsenal de críticas, estadísticas, el machacar sobre temas que terminan instalando, en un hábil movimiento, que hace involucrar a la Coalición Republicana, que pasa a una defensiva constante, tratando de desmentir un relato creado, que distrae, pero alimenta militantes, por el otro.
Primero, llenaron de carteles anunciando “el gobierno fracasó”, luego Cosse comenzó con el relato de la falta de medicamentos, el tema de la llamada “infantilización de la pobreza”, una semántica típica generada por la izquierda, que la mayoría de la población no interpreta cabalmente, pero que con su insistencia y repetición parece ser el gran tema.
No vamos a desconocer el problema, que ya tratamos en otras notas, pero si, desmenuzar un poco la trama, por la cual se le endilga a este gobierno, la responsabilidad de este drama, como si la administración de izquierda, no haya tenido nada que ver, cuando esto es algo que tiene décadas de arrastre y existencia.
De ahí, que asistamos a una constante discusión, de cuanto le van a asignar para resolver este asunto, el que termina en una pugna por la cantidad de recursos a transferir.
Mientras tanto, saber como se harán todas las buenas intenciones que Orsi nos leyó desde la Plaza de Colonia, es algo que no escuchamos ni leemos en ningún lado.
Le hicieron nombrar al eventual ministro de economía, don Oddone, el cual ni siquiera cuenta con la aprobación de buena parte del Frente, ya que los grupos más ortodoxos del marxismo, que baña a esta coalición, no lo acepta ni coincide con su línea económica, lo que asegura desde ya, incertidumbre sobre quien llevaría las riendas, de ser gobierno.
¿Usted piensa que Orsi, cuenta con la personalidad, firmeza, conocimiento para imponerse a los grupos duros que manejan este partido y sus aliados sindicales?
Recurren a Mujica, que seduce a muchos militantes, pretende suplantar las naturales carencias del candidato, el que debe ser reforzado, por figuras emblemáticas, apelando exclusivamente a aspectos emocionales que distraigan sobre la falta de ideas.
Mujica y sus más cercanos aliados, saben que al estar cerca del fin de su existencia, deben intentar “blindar” a su antiguo MLN, hoy devenido en MPP, el cual no ha podido generar líderes que superen a los antiguos que están en extinción sin pausa.
Y no nos confundamos, que no es un tema solo de cantidad de votos, que para la otra fuerza que maneja al Frente, o sea, el partido comunista, esa cantidad, no es un detalle que aliente sus aires democráticos, ya que su estrategia no depende de ellos, por lo que, con la desaparición de Mujica, aparecerá un espacio en disputa.
La estrategia de demoler y picar, cual pájaro carpintero, las certezas, obras, inversiones, atenciones en pandemia, la sequía, convivir con un vecino con desequilibrios económicos graves y su incidencia en nuestro país, son temas que han sido olvidados y bastardeados de tal forma, que muchos ciudadanos han sido convencidos de que esto es así.
La creencia de que casi somos Haití, cuando se describe un país sin cosas a destacar, que no se hizo nada, que son todas carencias, es un obvio relato artificial, que tiene la siguiente secuencia, se repite una y otra vez, se instala, pasa a ser parte de la agenda a discutir, se incorpora por cada dirigente y se termina creyendo por los militantes.
Sería interesante preguntar a quiénes ostentan un buen pasar, por los vehículos, residencias, estilo de vida, que cosas son, las que los motivan o impulsan, para inclinarse por un cambio, que es encabezado, no liderado obviamente, por un candidato que no ofrece certezas, rumbos, como ideas que tanto le cuesta exponer.
¿Percibe esto amigo lector?
El Frente ha optado por una ficción, al insistir, sobre que el gobierno no hizo nada, que todo está en el debe, para lo que describen y detallan todos los males, presentándose como los únicos capaces de cambiar esa realidad, que se contamina, con lujosos vehículos y propiedades embanderadas con los colores de la izquierda, en fin…
En las atomizantes publicidades que soportamos en estos días, más allá de jingles, canciones e invitaciones a votar por tal o cual lista, no escucho propuestas concretas, más allá de los avisos de Cabildo Abierto, que sobre sus ejes de campaña, nos dice que es lo que harán o que medidas tomarán. ¿Escuchó alguna otra?
La izquierda, nos pone alguna canción, o nos muestra a Mujica, tomado de cerca, con un notorio faltante de piezas dentales, en una clara intención de generar lástima, alguien que será de los últimos líderes que la izquierda muestre y en un último intento de arrastrar votos provocados por la emoción, que suplante al candidato y su poca acción.
Para colmo, vi recientemente, una intervención del economista Ferreri, un referente de los asesores económicos, despachándose alegremente, sobre un eventual impuesto, aporte, como guste llamar, que todos los habitantes del país, que lleguen a Montevideo a usar sus diferentes servicios, instalaciones, etc., se debería pensar en esta opción.
Una clara y evidente muestra de desprecio por el habitante del interior del país, del que siempre han renegado, bastardeado, menospreciado, por esa clara no adhesión histórica a los partidos de izquierda y sus propuestas, que la sabiduría de la gente de tierra adentro ha sabido interpretar, al no dejarse seducir por la demagogia de intelectuales del asfalto.
Llegados hasta aquí, a pocos días de la decisión a la que estamos convocados, aturdidos por encuestas que se superponen, que muestran porcentajes que suben y bajan, que a muchos puedan marear y a otros tantos, seduzcan a inclinarse por los mejores posicionados, algunas cosas parecen ir quedando en claro.
El candidato y el partido, mejor posicionado, según aquellas, dejan traslucir al presidenciable del Frente Amplio, con muchas carencias como las detalladas, en un partido con contradicciones en la interna, con una disputa, por quien será el que terminará liderando la conducción de esta fuerza política, entre dos poderosos rivales.
Invito al lector, a imaginar a Orsi dirigiendo el país, si es que hay, un porcentaje tan alto de ciudadanos dispuestos a dar su voto, solo me hacen pensar, que las heladeras, no solo enfrían…
Daniel García
