CARTAS ABIERTAS de Roberto Alfonso Azcona

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Montevideo, Noviembre 26 de 2024

Sr. Yamandú Orsi

Presidente Electo de la República Oriental del Uruguay

Estimado Sr. Orsi,

Con el mayor respeto, me dirijo a usted para felicitarlo por su reciente triunfo electoral, que lo posiciona como el próximo Presidente de todos los uruguayos. Su victoria refleja el respaldo de una parte importante del país y la esperanza de muchos en que su liderazgo pueda abrir un camino hacia un Uruguay más justo y desarrollado.

Reconozco que el momento que vivimos exige madurez política, capacidad de diálogo y la construcción de consensos para abordar los desafíos que compartimos como nación. Desde esta perspectiva, quisiera presentarme como Roberto Alfonso Azcona, un ciudadano que defiende los principios de libertad, desarrollo productivo y mejora constante de la calidad de vida de los uruguayos.

Como oposición, me comprometo a ejercer un rol crítico pero constructivo, señalando con responsabilidad los riesgos que pueden surgir de las políticas planteadas, particularmente en materia de economía. En este sentido, quisiera compartir una breve reflexión sobre algunas preocupaciones que considero fundamentales:

Desafíos Económicos y Sostenibilidad Fiscal

Sabemos que su propuesta incluye un ambicioso programa de inversión en educación, salud, seguridad y obras públicas. Sin embargo, queremos subrayar algunos riesgos asociados a las formas de financiamiento históricamente utilizadas por el Frente Amplio:

1. Aumento de Impuestos: Las cargas adicionales al IRPF, IVA u otros tributos han demostrado afectar especialmente a la clase media y los sectores productivos, limitando el crecimiento y la inversión.

2. Endeudamiento Público: La expansión del gasto financiada con deuda puede comprometer la estabilidad financiera del país, restringiendo la capacidad de futuros gobiernos para implementar políticas públicas efectivas.

3. Déficit Fiscal: Un gasto desmedido sin priorización puede llevar a déficits insostenibles, obligando eventualmente a ajustes perjudiciales para la población.

Mi preocupación radica en que estas medidas, aunque bien intencionadas, pueden tener efectos adversos en la vida cotidiana de los uruguayos: un costo de vida más alto, menos oportunidades de empleo y una economía menos competitiva.

Propuestas Alternativas y Oportunidades de Colaboración

Abogo por soluciones que prioricen la eficiencia del gasto público y fomenten la inversión productiva, sin cargar innecesariamente a los ciudadanos:

1. Enfoque en la Inversión Productiva: Impulsar sectores estratégicos como la agroindustria, tecnología y exportaciones para generar empleo genuino y sostenible.

2. Reducción del Gasto Improductivo: Realizar auditorías rigurosas del gasto público para eliminar partidas superfluas y priorizar inversiones que beneficien directamente a los ciudadanos.

3. Modernización del Estado: Promover la digitalización y la eficiencia administrativa para reducir costos, mejorar servicios y aliviar la carga sobre los contribuyentes.

Creo que un enfoque equilibrado puede garantizar que el Uruguay del futuro sea próspero, innovador y capaz de competir en un mundo globalizado, sin comprometer la estabilidad económica de las generaciones venideras.

Un Compromiso de Diálogo y Trabajo por el País

Me comprometo a ejercer una oposición liberal responsable, orientada a aportar ideas, señalar posibles riesgos y trabajar en soluciones. Sabemos que las diferencias ideológicas no deben ser un obstáculo para avanzar hacia un objetivo común: construir un Uruguay donde cada ciudadano pueda realizar sus sueños y contribuir al desarrollo de la nación.

Le deseamos éxito en su gestión y reiteramos nuestra disposición al diálogo y al trabajo conjunto en todo aquello que sea en beneficio de los uruguayos.

Con respeto y consideración,

Montevideo, 26 de noviembre de 2024

A la atención de los líderes y representantes de los partidos de la Coalición:

Estimados compatriotas,

Escribo con un profundo sentido de responsabilidad hacia el futuro de nuestra nación. La historia reciente nos ha mostrado que el avance del populismo representado por el Frente Amplio (FA) no solo pone en riesgo el desarrollo sostenible del país, sino que también amenaza con perpetuar un sistema político que prioriza el asistencialismo y la dependencia estatal sobre la libertad, el esfuerzo y la productividad. Frente a este panorama, es momento de plantearnos un desafío trascendental: la unificación de nuestra coalición en un solo partido político.

La experiencia nos ha demostrado que las alianzas electorales, aunque efectivas en el corto plazo, no logran transmitir una visión coherente y sostenida de país. La fragmentación de mensajes, estrategias y prioridades debilita nuestra capacidad de inspirar confianza en la ciudadanía, especialmente frente a una maquinaria populista bien aceitada como la del FA. La unidad en un solo partido nos permitiría:

Consolidar una identidad común: Un único partido fortalecería nuestra capacidad de transmitir un mensaje claro y contundente, que refleje los valores de libertad, desarrollo productivo y progreso social que nos unen.

Optimizar recursos y esfuerzos: La unificación permitiría coordinar de manera más eficiente nuestras campañas, aprovechar mejor los recursos y evitar las duplicaciones que surgen de las estructuras paralelas.

Aumentar la confianza de la ciudadanía: Al presentarnos como un partido unificado, enviaríamos un mensaje inequívoco de madurez política y compromiso con el bien común, alejándonos de la percepción de alianzas temporales o estrategias electorales coyunturales.

Enfrentar al populismo con mayor solidez: Un solo partido nos colocaría en una posición de ventaja estratégica frente al Frente Amplio, mostrándonos como una fuerza sólida y cohesionada capaz de ofrecer un modelo alternativo para el país.

Esta propuesta no busca diluir nuestras identidades individuales, sino integrarlas en un proyecto mayor, en el que nuestras fortalezas se potencien y nuestras diferencias se conviertan en herramientas para construir consensos. Unificar nuestra Coalición en un solo partido no solo es una decisión estratégica; es un imperativo histórico para garantizar que Uruguay pueda avanzar hacia un futuro de oportunidades reales y sostenibles para todos.

Quedo a disposición para continuar este diálogo y colaborar en la construcción de esta visión compartida. Juntos, podemos liderar el cambio que nuestro país tanto necesita.

Con estima,

Roberto Alfonso Azcona

Ciudadano Uruguayo

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