El presidente electo, fue sometido a operaciones de cataratas en ambos ojos, noticia que ha circulado por estos días.
Las cataratas en los ojos se definen como, una opacidad en el cristalino del ojo, que es la parte clara que ayuda a enfocar la luz. Son una enfermedad que se desarrolla lentamente y sin dolor, y que puede causar visión borrosa, difusa o menos colorida.
Esa definición técnica, nos dice de que se trata dicha enfermedad, la que padece mucha gente y que en los últimos años, además se hizo famosa, gracias a la intervención de un número importante de oftalmólogos cubanos que realizaron esas operaciones aquí.
Los mismos bajo un halo de prestigio, operaron a cientos de compatriotas, hecho siempre resaltado por la izquierda, obviamente por el origen de los médicos, ya que por ser cubanos fueron revestidos de una sabiduría, que se asocia a una supuesta superioridad que imprime la conocida revolución, en todos los campos y en la salud, exageradamente.
Tal es así, que muchos pensamos que el presidente electo recurriría a dichos profesionales, pero curiosamente, lo hizo en una prestigiosa clínica privada, echando en este caso por tierra, con los promocionados y ensalzados médicos cubanos.
Independiente de estos detalles, seguro todos deseamos una pronta recuperación al próximo presidente y que dicha intervención, permita corregir los efectos de este mal.
Y como vimos, la visión borrosa, difusa o menos colorida, que provocan las cataratas, no pueden disminuir la capacidad del presidente, teniendo en cuenta los desafíos en su camino, el que ya comenzó a marcar, curvas sinuosas, pozos, un tránsito que parece desordenado y conductores que han acelerado fuertemente.
¿A que cosas nos referimos? La transición de gobierno, a pesar de transcurrir en épocas estivales y de licencias, no ha pasado desapercibida, como es el caso de las diferentes designaciones y algunas declaraciones notoriamente turbulentas.
La futura ministra de salud, nos anuncia que va a mejorar los tiempos de atención del Fonasa, un invento del gobierno anterior frenteamplista, el que arrastra un déficit congénito desde su nacimiento, quien nadie ha podido corregir en ambos problemas.
Además, dejó al descubierto su preocupación, la cual se dirige a aumentar el período de tiempo para realizar un aborto, lo que sería, asesinar a ese niño en gestación, con un mayor desarrollo formativo, lo que muestra el grado de interés de la ministra, el que se acerca a la crueldad y desprecio, por lo más importante del ser humano que es la vida.
La doctora, siempre tan preocupada por los niños pobres, parece no importarle el sufrimiento al que son sometidos los pobres niños, víctimas de una sanguinaria intervención, que testimonios y filmaciones muestran en todo su horror
La conocida mutualista “compañera” Casmu, padece una grave situación financiera, donde veremos que alternativas y soluciones manejan, en que está involucrada un ícono empresarial de izquierda, que ha estado siempre muy cerca de un manejo ineficaz.
En el Mides Gonzalo Civila, un socialista ortodoxo formado en filosofía e impregnado de la nefasta Teología de la Liberación, asegura una administración que no resolverá ningún asunto vinculado a esta cartera, ya que solo nos habla de políticas comunitarias, con un equipo afín ideológicamente hablando, que aumentarán un clientelismo congénito.
Esa teología, que manipulada por el marxismo, ha implantado su “opción por los pobres”, los que no dejarán de serlo, siendo usados con fines revolucionarios, como veremos.
La educación, siendo un tema tan prioritario, como clave, es una certeza que retrocederá, al acentuarse las políticas sobre ideología de género, provocando una distorsión inmensa en la formación de niños y jóvenes.
A lo que debemos sumar, la vuelta de los sindicatos al gobierno, muestra que tenemos con las designaciones como la de Elbia Pereira, integrante del pitcnt, eterna promotora de conflictos, siempre con una mirada de corte marxista, por lo que esa visión, aterrizará en el área, de la mano del ministro Mahía, un fiel servidor de la élite que dirige el FA.
El verdadero poder, estará en manos del secretario Sánchez, el prosecretario Díaz y el ministro Negro, quiénes tendrán la llave maestra de las decisiones, en donde además de se desarrollará, la disputa histórica entre el MPP y el PCU, como ya hemos expresado en varias notas anteriores, la que seguro será evidente al desaparecer Mujica.
Podríamos seguir comentando, buena parte de lo que visualizamos nos espera en los próximos meses, aunque no nos operamos de cataratas, pero sin duda, quien roba por lejos la atención, ya que arrancó con el acelerador a fondo, es el designado ministro de trabajo, Juan Castillo, secretario general del Partido Comunista, quien nos regaló una “catarata” de mensajes.
Antes de ser confirmado en el cargo, nos había anunciado, que se debía atender el resultado del plebiscito de la seguridad social, cuyo partido fue impulsor del mismo, pero no en el sentido de la opción triunfadora, sino, en esa capacidad de dar volteretas en el aire y colocar el foco en el lado contrario, o sea atender a quiénes votaron por cambios.
Posición, no casual ni inocente, ya que su objetivo de poder derogar las AFAPS y quedarse con el botín de 23.000 millones de dólares, aseguraría repartos y por ende clientes electorales por varios períodos, mientras iríamos rumbo a una “venezualización”.
No conforme con esto, que tendría la legitimidad de dar cumplimento al programa del frente, lo que salvaría cualquier objeción, habló también de otra consigna, que el pitcnt lanzó hace meses, a través de su presidente, Marcelo Abdala, el del “autito chocador”, para llevar la jornada laboral a 6 horas, sin afectar el ingreso que se paga por 8 horas.
Asunto no menor, con consecuencias directas sobre empleos, permanencia de empresas, ya que la productividad, algo relacionado con el desempeño, los costos, remuneraciones, nunca ha sido un item que al pitcnt o a la izquierda, le haya preocupado o considerado en sus demandas, las que toman el marxismo y la plusvalía como sustento, equivocado por cierto.
Castillo, convertido en competidor de Abdala en conducción, aceleró a fondo en ocasión de la reciente asunción de Maduro en Venezuela, cuando se despachó con la reflexión de que Maduro presentó las actas, que nadie vio, compitiendo con Lucía, que había visto el título de Raulito Sendic.
Validó también al gobierno venezolano, así como calificó a Edmundo González, el ganador legítimo de las elecciones, como que no era nadie, como para ser tenido en cuenta, o que el presidente electo Orsi lo tuviera que recibir.
No sorprende, que Castillo y su partido internacional, declaren tan sueltos de cuerpo y hasta con vehemencia, su postura a favor de una evidente dictadura que viola todos los derechos, normas, leyes, ya que es lo habitual de este partido, apoyar regímenes que así proceden, más teniendo en cuenta en sus antecedentes 150 millones de víctimas.
Seguirán los discursos, condenas y voces engoladas reclamando que Maduro entregue el poder, cosa que por los mecanismos usados hasta ahora, no sucederá.
Se impondrá una vez más, lo que dice Castillo, sus amigos y aliados, más todos los que seguirán esperando alguna conducta de respeto o revestida de valores democráticos, de quiénes la han usado y usarán siempre, para dinamitarla desde adentro, cual “Caballo de Troya”, además de aplaudirlos como un partido más, cuando festejen su aniversario.
El presidente electo, cuando se recupere de sus intervenciones, deberá agudizar su visión si es que tiene intenciones de llevar adelante un buen gobierno, porque lo que ha acontecido hasta ahora y como adelanto, es que todo está muy turbulento “en las cataratas de Orsi”
Daniel García
