EL PASADO RECIENTE CONTADO POR LOS MEDIOS DE PRENSA DE LA ÉPOCA (4)
Diario EL DÍA – 12 de Enero de 1964 – Página 15
BELLA UNION, 11. (Especial para EL DIA por Carlos R. Cravallo). Clima de nerviosidad y tensa expectativa creó en esta ciudad la noticia de que, mediante la rotura de un candado, habían sido robados de la receptoría aduanera, los once fusiles Mauser que componían el armamento de ese destacamento.
Según la primera información que recogimos en el propio lugar de los hechos, el hurto se perpetró entre la 1 y 30 y las 4 de la madrugada de hoy, descubriéndolo el guarda-aduanero que concurrió a abrir la receptoría. Comunicada la anormalidad a la policía local y al receptor encargado S. Fernando Castillo -que se encontraba en Salto- se comprobó que habían sido robados 11 fusiles Mauser, modelo 1908, de repetición, calibre 7 mm y 7 bayonetas, estando intactas las mercaderías incautadas en los últimos procedimientos y que sobrepasan los treinta mil pesos, así como un taxímetro brasileño que también había sido requerido por las autoridades aduaneras.
La Receptoría de Bella Unión
Está ubicada en un viejo galpón de AFE, techo de zinc y cuya puerta se cierra con un candado pequeño y dos cerraduras tipo Yale. Dista a unos 25 metros de la ruta 3 y a dos kilómetros del puente que une a Bella Unión con la Barra de Quaraí.
Insólitamente este resguardo, en el que se almacenan las mercaderías incautadas, queda de noche sin guardia, protegida únicamente por los débiles elementos -candado y cerradura- que señalamos anteriormente.
El robo de las armas
Según la versión ofrecida por las autoridades que intervienen comisario de órdenes de Artigas, Carlos Monge y el comisario Hugo Larrosa de la 7ª sección del departamento, el propósito de los atracadores fue claro y preciso: el robo de los fusiles. Confirma esto el hecho de que nada más tocaron, no llevándose las municiones porque no las encontraron debido a una imprevisión de un guarda aduanero, que después de sacarlas de un cajón las dejó en el suelo, tapadas con un papel.
Aparentemente, después de robar las armas, se dirigieron a la ruta 3, donde se encontraron dos tapabocas de fusil, no sabiéndose si tomaron hacia el Sur o hacia Brasil.
En cuanto al robo, se produjo después que los delincuentes rompieron el débil candado y con cuatro ganzúas que dejaron en el lugar -una de ellas limada- abrieron las dos cerraduras que tiene la puerta.
El receptor Castillo expresó que en distintas oportunidades había recibido anónimos, intimándolo a disminuir su acción represiva, pero ello -según lo que hemos podido saber aquí- no es anormal, ya que se pretende con ese sistema atemorizar a quienes tienen a su cargo el control de la Aduana.
Quienes serían los autores
Según lo conversado con las autoridades, en un primer momento se establecieron dos posibilidades en cuanto a quienes pueden haber cometido el hurto. La primera de ellas se relaciona al mismo grupo de agitadores que meses atrás robara las armas del Club de Tiro de Nueva Helvecia. La segunda indica como autores, elementos del vecino país, que pretenden muñirse de armas de largo alcance para las intentonas revolucionarias de Río Grande. Tampoco se descarta la posibilidad de que esté íntimamente vinculado a este hecho el agitador Raúl Sendic, único prófugo del robo de Nueva Helvecia y a quien se ha dado como escondido en una de las azucareras del Litoral norte.
En cuanto a la anómala situación de que la receptoría quede de noche sin guardia, no se han dado aún explicaciones más o menos satisfactorias conociéndose únicamente que en el resguardo que existe en la cabecera del puente, a dos kilómetros de allí, queda un guarda aduanero, aunque no en forma permanente-
N. de R. – Estamos en condiciones de informar que difiriendo con lo expresado por nuestro corresponsal, el telegrama recibido en la Dirección General de Aduanas, manifiesta que el volumen del robo alcanza a 12 máuseres y su revólveres.
“ESPERAN ACLARAR A BREVE TÉRMINO EL ROBO DE ARMAS EN BELLA UNIÓN”
Diario “El Diario” 12 de Enero de 1964-Pág. 7
TIENE OPTIMISMO LA POLICIA
BELLA UNION, 12. (Especial para “El Diario”). – las autoridades policiales locales supervisadas por el Jefe. Sr. Mario Oronoz, procuran hallar alguna pista firme sobre el robo de 11 máuseres u ocho bayonetas, del local de Receptoría de Aduana de esta ciudad. De acuerdo a las noticias que nos brindara este mediodía un jerarca de la Jefatura, en las próximas horas podría estar aclarado el sensacional hurto, similar al registrado meses atrás en el Club de Tiro Suizo de Nueva Helvecia en Colonia.
Todas las pesquisas llevan a presumir que fue Raúl Sendic -el hombre afanosamente buscado por el anterior hurto de armas- quien planeó el descubierto ayer e incluso vieron compinches del prófugo merodeando por los alrededores del galpón de AFE, que oficia de Receptoría. Además el suceso se vincula a un paro de obreros cañeros -unos 120- que reclamaban el pago de jornales.
RECEPTORÍA SIN VIGILANCIA
Es realmente insólito el hecho de que la Receptoría de Aduana de bella Unión quede de noche sin vigilancia, considerando que allí se guardaban armas largas y además mercaderías de contrabando incautadas por sus funcionarios y hasta un automóvil.
Además ello se torna más grave si se tiene en cuenta que el local de tal Receptoría ofrece escasa seguridad en cuanto al impedimento de acceso al ismo, cuya puerta tenía apenas un candado pequeño y dos cerraduras tipo Yale.
Se trata de un viejo galpón de AFE de techo de zinc que se encuentra a unos 25 metros de la Ruta 3 y a dos kilómetros del puente que une bella Unión con la Barra de Quaraí.
SOLO INTERESABAN LOS FUSILES
Todos los hechos indican que los autores de esta sustracción estaban interesados únicamente en el robo de los 11 máuseres y las 8 bayonetas ya que se desinteresaron absolutamente de las mercaderías de contrabando allí almacenadas y que sobrepasan los 30 mil pesos de valor así como un taxímetro brasileño que a la vez había sido detenido por las autoridades aduaneras locales.
Nada tocaron los ladrones que no fuesen las armas y dejaron las municiones porque éstas hallábanse en el suelo tapadas con papeles, razón por la cual pasaron inadvertidas a los delincuentes. En realidad esto se debió a una imprevisión de un funcionario de la Receptoría, quien tras sacarlas de un cajón, no guardó nuevamente las balas en su lugar de origen, hecho que en última instancia vino a ser afortunado, pues si no los ladrones hubieran marchado también con ellas.
EL HURTO FUE DE MADRUGADA
El hurto de los máuseres se produjo entre la 1.30 y las 4 de la madrugada de ayer, habiéndolo comprobado el guarda aduanero que concurrió a abrir la receptoría. De inmediato comunicó la anormalidad al receptor encargado, Sr. Fernando Castillo.
Esta persona se encontraba en Salto y antes de su llegada tomó intervención la policía local representada por el Comisario de Ordenes de Artigas, Carlos Monge, y el Comisario Hugo Larrosa, de la 7ª sección del departamento.
Se pudo comprobar que los delincuentes, tras romper el débil candado que se hallaba en la puerta del acceso al galpón de la Receptoría, valiéndose de cuatro llaves maestras que dejaron en el lugar abandonadas (luego del robo) lograron abrir las dos cerraduras Yale, que completan la endeble seguridad del local.
HUYERON POR LA RUTA 3
El hallazgo de dos tapabocas de los máuseres, caídos en la Ruta 3, indica que los maleantes huyeron por este lugar, emprendiendo la marcha hacia el Sur o hacia el Brasil.
De acuerdo a lo manifestado por el receptor Castillo, en varias ocasiones ha recibido anónimos intimándolo a disminuir la acción represiva de los contrabandistas. Pero esto es algo habitual en las Receptorías, pues con ello se pretende atemorizar a quienes tienen a su cargo el control de Aduana para que así facilitan un mayor movimiento de quienes portan matutes.
NUMERACIÓN DE LAS ARMAS
Brindaremos a continuación los números de diez de los once máuseres robados, que son modelo 1908, de repetición, de 5 tiros para balas de 7 milímetros. Esta es la referida numeración: 1313, 937, 2073, 2026, 1366, 3611, 1299, 3178, 3659 y 1193.
Estas armas pesan unos cuatro kilos cada una y tienen 1 metro 60 de largo, por lo que evidentemente debieron ser trasladadas desde el interior de la receptoría hasta el vehículo o animal que las transportó, por parte de más de una persona.
Hasta el momento no se tienen pistas firmes respecto a los autores de este hurto de armas, muy similar al registrado en el Club de Tiro Suizo de Nueva palmira, meses atrás.
BUSCAN A LOS AUTORES
La policía no descarta la posibilidad de que Raúl Sendic, el hombre aun prófugo por el robo de armas -gran parte de las cuales se recuperaron- pueda ser también el gestor de este sensacional suceso. Por otra parte, esta presunción coincide con las versiones que han venido circulando acerca de que Sendic se encontraba guarecido en una de las azucareras del litoral norte.
Todavía resulta harto difícil precisar los fines que persiguen quienes se apoderaron de los máuseres. Existen varias conjeturas, o que fueron revolucionarios brasileños, o ladrones profesionales, o gente de Sendic dispuestas a concretar sus proyectados planes subversivos.
Diario “Acción” 13 de Enero de 1964-Pág. 5
MISTERIO A DOS PUNTAS – LAS ARMAS, ¿PARA QUÉ?»
No hay pistas sobre el destino de los 11 fusiles Máuser y bayonetas robadas a la Receptoría de Aduanas de bella Unión. Ola de rumores: Raúl Sendic, prófugo aún, o una supuesta revolución en un Estado del Brasil.
Una cadena formada recién con dos eslabones inesperados para nuestro país se está uniendo lenta pero inexorablemente, desde hace cuatro meses y medio. La crónica policial ha registrado todo tipo de hechos, desde el asesinato frío y calculado hasta el más sensacional de los asaltos a bancos. Pero en Uruguay, el robo de armas largas -especialmente- ha revolucionado los conceptos periodísticos clásicos para levantar un manto de inquieta alarma. Por ello, que varios hombres -así se presume- hayan penetrado a un galpón de la Receptoría de Aduanas de Bella Unión para robarse 11 fusiles Máuser de 1908 y sus respectivas bayonetas, constituye una clarinada de atención para los tiempos que corren.
El suceso de Nueva Helvecia, mojón obligado para los artículos periodísticos y para las febriles investigaciones de los servicios de Inteligencia de la Policía y de las Fuerzas Armadas cobra ahora tintes más firmes, y se encadena con este nuevo hurto que orilla, subconscientemente, una palabra prohibida: subversión.
Pero, ¿dónde?
*INTERROGANTE
He ahí el punto clave de las investigaciones que se vienen realizando. Las más diversas posibilidades se han venido barajando desde que los desconocidos cortaron con una tijera apropiada el frágil candado que pretendía guardar las armas destinadas a los servicios de Represión del Contrabando en la frontera. Esos mismos hombres que conocían a la perfección el terreno que pisaban, violentaron después dos cerraduras, tan elementales como el candado “Yale”, mediante cuatro ganzúas de alambre de distinto milimetraje. Así quedó a sus expensas una pieza con piso de tierra y paredes y techo de cinc. No eran más de las 2 de la mañana según todos los cálculos y el paraje estaba solitario. Bella Unión, apasiblemente aletargada junto al codo del Uruguay aparecía desdibujada entre las sombras a 4 kilómetros de distancia. La barra del puente internacional sobre el río Cuareim apenas si se advertía a dos kilómetros hacia el Noreste. Era sábado (12 de enero) y los 25 funcionarios encargados de la vigilancia fronteriza ocupaban otros puestos o descansaban fuera de sus turnos habituales.
Más allá de las naturales diferencias de paisajes, lugares o costumbres, la pregunta igual que en el robo de Nueva helvecia surge con una fuerza anonadante: ¿hacia dónde han ido estas armas?
Más que ubicar a los responsables, la urgencia del momento para los servicios de seguridad es saber el destino de las mismas. Parece incongruente, pero en cualquier nación del mundo eso es lo primero.
*DATOS
Para la crónica periodística normal la policía de Artigas investiga como si la difusión de la tarea llevara un retazo de tranquilidad a la opinión pública, sorprendida y extrañada. Pero, trabajando en las sombras se mueven hombres de Inteligencia y Enlace desempolvando viejas normas y recientes experiencias. Así se unen hechos que revelan varias cosas: los asaltantes no se llevaron mercaderías por 30 mil pesos, ni tocaron tampoco un automóvil brasileño. Buscaron municiones que sabían ubicadas en un cajón que violentaron con presteza. No las encontraron, porque las balas estaban diseminadas en el suelo y cubiertas con una inofensiva hoja de diario. Después, abandonaron la Receptoría asaltada con la misma impunidad con que habían penetrado. Los ladrones tomaron la ruta 3 y a unos 25 metros dejaron caer (¿o marcaron deliberadamente un camino falso?) dos tapabocas de los viejos fusiles.
Debieron, seguramente, transportar en algún vehículo los 60 filos de vieja madera y hierro. Cada fusil pesa 5 kilos y tiene casi dos metros de largo. Ahora parece difícil imaginar cómo manejaron nuestros abuelos armas como esas en medio del fragor de una batalla.
*PISTAS
La única cosa física que hoy se advierte en Bella Unión, sobre este robo, son tres soldados del Destacamento Militar que detienen y piden documentos a todo transeúnte u ocupantes de vehículos.
La calma es la constante inevitable de un lugar asfixiado por la humedad caso tropical. La policía local sigue investigando y ya sabe que los 11 fusiles desaparecidos podrían tener sus respectivas municiones.
¿O acaso las municiones robadas en Nueva Helvecia un día de setiembre de 1963 no eran cartuchos de 7 milímetros? Eran 3 mil unidades y nunca aparecieron. Según opinión de expertos militares, esas municiones encajan perfectamente en las recámaras de los fusiles de bella Unión.
Pero ¿y en Brasil? Ha corrido insistentemente el rumor de que estas armas de ahora han sido robadas por simples contrabandistas para colocarlas en Río grande del Sur. Pero es sólo eso, un rumor.
*CONCLUSIONES
No las hay, por el momento. Sólo presunciones. Nada puede afirmarse sobre un posible robo para el Brasil o sobre la reaparición de los culpables del robo en Nueva Helvecia. Coincidencias hay muchas, algunas de ellas muy sutiles. Se ha mencionado nuevamente a Sendic, dirigente sindical socialista, prófugo de la Justicia sanducera que quiere interrogarlo para después darle tiempo necesario a Inteligencia y enlace. Pero sobre él tampoco, en este caso, existen pruebas definidas. Cuando su nombre se menciona las coincidencias aumentan. Mientras tanto, dos interrogatorios flotan pesadamente en el ambiente natural de las especulaciones:
¿Hacia dónde fueron esas armas?
¿Quiénes son los asaltantes?
(Copia fiel de los originales)
Fuente: www.pasadoreciente.com “Museo de la Memoria del Pasado Reciente”.
Nota de la Próxima Semana: “ROBAN ARMAS EN LA CIUDAD DE MINAS (LAVALLEJA) Fecha: 20 de Abril de 1964“