ALEMANIA, HABLANDO DE GUERRA… Por Daniel García

Esta expresión era frecuentemente utilizada por uno de mis abuelos, quien hacía referencia a ella, cuando quería destacar esas situaciones por las cuales personas, instituciones o países, se asombraban, hacían críticas, o se escandalizaban, por algún hecho en el que sus antecedentes no les dejaba bien parados y era mejor el silencio.

Alemania, se ha caracterizado por una activa, como decisiva participación en importantes guerras mundiales, de allí esa referencia, un tanto sarcástica, es cierto, sin que esto implique dejar de reconocer las grandes virtudes de Alemania como país, su influencia en múltiples aspectos del arte, la ciencia y la cultura y la seriedad y responsabilidad de su gente.

Los últimos acontecimientos vinculados al famoso pasaporte, como sus amplias repercusiones en el quehacer político, han dejado, no solamente secuelas, por las renuncias de notoriedad, sino por mostrar, además, hasta donde puede alcanzar la lucha electoral, la batalla por conquistar voluntades, aprovechándose de lo que sea.

Casi todos los partidos han tenido la directa responsabilidad de gobernar en algún momento y todos han cometido aciertos y errores, por lo que salir a la cancha a embanderarse, ostentosamente con virtudes exclusivamente, parece un tanto presuntuoso, soberbio y sin ninguna autocrítica ni fundamento en el mundo real.

Podemos comprender, que la oposición encabezada por el Frente Amplio, junto al pitcnt, intenten sacar partido de una situación que genera incertidumbres, dudas, sospechas y una lista larga de intrigas, versiones, que no dejan al actual gobierno, es una cómoda posición frente a estos hechos de apariencia delictiva.

Pero, la izquierda en general, para englobar en el casillero correspondiente a estos dos actores, no ha mostrado ser esa fuerza poseedora de una moral intachable, ni tampoco de conductas y acciones ejemplares, que no hayan generado sospechas y acciones,  de bochorno histórico.

Una larga lista circula en las redes, dando cuenta de centenares de hechos de corrupción de la izquierda, por no respetar, el orden institucional establecido.

Así pues, que el senador Da Silva del Partido Nacional, reconozca, que ha sido ingenuo, respecto a las intenciones y principios del Frente, al considerarlo un actor político, sin entender, que se trata de “un verdadero enemigo que solo busca la destrucción de todo oponente político”.

Sus 15 años de gobierno, han dejado una herencia negativa, difícil de cuantificar, no solo materialmente, sino por el deterioro que comprende cosas más intangibles, como pueden ser valores, enseñanzas, actitudes de los ciudadanos en general.

El ex presidente Mujica, nos dijo como algo normal, el famoso, “como te digo una cosa, te digo la otra”, echando por tierra el valor de la palabra dada y expresada.

Como cuando dijo, que a los uruguayos no nos gustaba trabajar, generando un mandato inconsciente en sus acólitos. En efecto, para el ex presidente,  el valor de la palabra es tan relativo como débil.

Esa prédica es mezquina e irresponsable, sobre todo en boca de un primer mandatario, alimentando y contaminando además, a tanta gente que se ha creído esto, como una máxima, que les permite proceder sin escrúpulos, o ir adónde el viento los arrastre.

También legó, como otra máxima rectora del proceder habitual de la izquierda, “que lo político, está por encima de lo jurídico”, logrando poner el orden institucional patas para arriba.

Mujica y su prédica disolvente, ha sido tal vez, el pico más alto de la consigna anárquica y llena de odio del Frente Amplio, en esos 15 fatídicos años, en los que gobernó y logró influir para mal en nuestra matriz cultural.

El ex vicepresidente Sendic, instaló otra referencia inaudita, otra construcción sicológica limitante que la izquierda se ha creído, convencido y asumido como verdad, pensando que es una certeza indiscutible, cuando nos anunció que “si es de izquierda, no es corrupto y si es corrupto, no es de izquierda”.

Justo él para decirlo, representa el contrasentido, la paradoja en su máxima nota, en el pentagrama carnavalero.

Cualquiera de estos dos personajes, han cosechado en su haber, una larga lista de hechos irregulares, muy graves y todos con altos costos, tanto en vidas, como en dinero, como Mujica, que allá por el año 1964, ya operaba como un ladrón común, paso previo a convertirse en un terrorista responsable de muertes, robos y años de tristeza para el país.

Sendic, un mentiroso sin par, cuando ostentó un título que no tenía, más el uso de tarjetas corporativas para satisfacer sus horas de sueño en forma placentera, no sin antes destruir ANCAP, produciendo un “agujero” de más de 1200 millones de dólares, habiendo encarado una puesta a nuevo de la planta, que no sirvió para casi nada. .

Todo coronado con su renuncia, Sendic hijo, representa un personaje  sin precedentes en la historia nacional, que motivó el pedido especial del Frente Amplio que gobernaba en ese momento, para que el gigantesco bochorno no fuera utilizado por la oposición, en función de preservar la institucionalidad, en la sesión del Senado que trató su escandalosa salida.

Obviamente, que la palabra empeñada oportunamente, fue respetada y Sendic, se retiró con pena, la de haber protagonizado una incalificable actuación, pero sin gloria seguro, para uno de los mayores escarnios que hubo que sufrir, esta vez si, con repercusiones planetarias.

Como recordatorio, para esta fuerza política que hoy se rasga sus vestiduras, olvidando situaciones y hechos que involucran a altísimos jerarcas y referentes, como cuando doña Lucía Topolansky, nos mintió a todos, al confesar, que había visto el título inexistente de Sendic, o como cuando se jactó de las excelentes falsificaciones de documentos que hacía durante su carrera delictiva como terrorista.

Sin duda será recordada como la compañera de Mujica, la que falsificaba documentos de alta calidad, condenaba seres humanos a muerte sumariamente y solo por convicción anti humana, ejecutaba la condena.

Atentos señores, ya que se escandalizan de un pasaporte entregado al Sr. Marset y en sus filas cuentan con expertos falsificadores, Topolanski lo declaró, públicamente admitió sus fechorías, por lo que debemos considerar, que deben ser varios más los “expertos”

Dentro de su supuesta “indignación”, les preocupa, en forma más que ostentosa, que el involucrado con el pasaporte, es un conocido narcotraficante y allí aprovechan para introducir la sospecha de la injerencia del narcotráfico en la política, intentando generar un vínculo directo de éste con la actuación del gobierno.

Se olvidan que esta causa tiene sus orígenes en 2018 y que la norma que permitió la entrega del pasaporte en cuestión, fue aprobada durante el gobierno de José Mujica.

La opinión pública, así como cualquier análisis sobre estos hechos, no puede dejar fuera de la consideración, que aconteció, o cual fue la conducta de la izquierda con el tema narcotráfico en general.

Recordemos, que al legalizar el consumo de marihuana, un hecho que no tenía ninguna prioridad como problema del país, que no solucionó nada sobre el asunto o afectó al narcotráfico, solo agravó el problema de la droga en el Uruguay, así como se debilitó la percepción de los daños que provoca el consumo.

Y sobre el tratamiento a narcos, y aunque les duela, la payasesca y ridícula fuga de uno de los mayores capos de la mafia y de las drogas del mundo, el mafioso italiano que iba a ser deportado para ser juzgado en su país.

Interrumpió su placentera estadía en cárcel central, más todos los privilegios y contactos con otros mafiosos de relevancia, que las autoridades alentaban, protegían y ningún frenteamplista pitcenetero, jamás cuestionó, para irse caminando como perico por su casa.

Pero esto, de orden doméstico, no es todo lo que debemos considerar, no podemos olvidar algo mucho más grave y que no aparece en el radar o se menciona, que es lo referido a las relaciones internacionales que la izquierda procura, que es parte sustancial de su misma esencia y que aquellos que los votan, deberían atender.

Hablamos del Grupo de Puebla y el Foro de San Pablo que apadrinan narco estados y amenazan entregar nuestros países a los carteles de la droga que preponderan en la política regional.

El Frente Amplio, como parte del Foro de San Pablo, Grupo de Puebla, o como gusten llamarse, convive con la flor y nata de todos los grupos guerrilleros de América, donde la mayoría, tienen directas conexiones con el narcotráfico, son parte de el, trabajan en alianzas redituables en el reparto de las ganancias hiper millonarias que disponen.

Ese exclusivo grupo, al que pertenece Maduro, Petro, Lula, Boric, Díaz Canel y tantos dirigentes de izquierda nacional e internacional, despliega conocidas vinculaciones, recibe financiación del mismo narcotráfico, en una siniestra alianza, que no podemos dejar al costado del camino y de la que no veo a nadie sorprendido o alertando siquiera.

¿Alguien le recuerda al Frente Amplio, sus dudosas relaciones con estados tan vinculados y cómplices de este flagelo que siembra muertes, miserias y drogadictos por miles?

Así es, que el propio presidente del Pitcnt, Marcelo Abdala, todos hemos visto cómo ha viajado para abrazarse y defender calurosamente a una figura siniestra como Maduro, presidiendo un verdadero narco estado, violador de todos los derechos existentes, del que don Marcelo es capaz de emitir elogios, propios de un buen y obsecuente “compañero de ruta”.

Embarcados en su conocida estrategia de destrucción del gobierno, montar todo tipo de sospechas, intrigas y dudas sobre el accionar de aquel, parece que optaron por tomar el bidón de nafta y rociar un poco, en el ya prendido fuego ambiente político local, convocando a una innecesaria, como reprobable marcha, que solo busca exacerbar ánimos radicalizados.

No sorprende,ver al Pitcnt,en esa alianza permanente con el mismo Frente, para ir hacia la desestabilización y el caos, ya tomando partido en asuntos de índole netamente política, ajenos a los objetivos y fines de un movimiento sindical, además, altamente desprestigiado.

No han podido explicar aún, como pudo costar 120 millones de dólares el famoso Antel Arena, que motivó, que removieran a su propio delegado en la Jutep, porque quiso dar vía para investigar,  18 millones de dólares un túnel en Av. Italia, plagado de problemas y un largo rosario de obras fallidas, despilfarros varios y hasta bandas que llevaron a cabo robos, que el propio Zabalza terminó denunciando a Mujica como responsable.

No han logrado explicar lo del arsenal del Sr. Feldman, en posesión de cientos de armas, algunas de alta potencia, que se importaron para la Policía y estaban allí, con la implicancia del fiscal Perciballe y el ex fiscal de Jorge Díaz.

Estos, directos participantes de una causa, no debidamente investigada y que siguen siendo actuales partícipes en todos los grandes asuntos, donde hay intrigas, filtraciones, procesos irregulares, de dos agentes y militantes notorios de la izquierda.

El Pitcnt, convoca a una marcha “en defensa de la democracia, contra la corrupción”, los mismos que no muestran sus ingresos, no tienen personería jurídica y mueven unos cuantos millones de dólares, sin que nadie pueda saber cómo se administran los mismos.

Sospechados y denunciados de irregularidades millonarias con cooperativas de viviendas, donde propios militantes fueron estafados, sin contar una larga historia de ser artífices de huelgas, paros, conflictos, que han costado millones de dólares de pérdidas al país y a los propios trabajadores que dicen defender.

De ahí, que hayamos recurrido a esta sarcástica sentencia “Alemania, hablando de guerra”…

Daniel García