Son ignorantes, pues, sus supuestos líderes no conocen el verdadero espíritu del concepto política y cuál es la función de esta. Solo pretenden homologar una parte de la población a la miseria para ser dominada por otra parte que la conforman gobernantes opresores.
Pitágoras decía:
El mejor gobierno es el que mantiene sus ciudadanos una clase media, pues, los ricos son insolentes y los indigentes son viles.
El mal del ignorante es: no ser noble, ni bueno, ni sabio y tener la ilusión de ser todo eso en grados suficientes. El gobierno de los comunistas de Venezuela sufre de este mal derivado de la voluntad de sus líderes. Estos siguen el patrón de los tiranos, mantienen al pueblo ignorante, tanto del acontecer como de las formas idóneas de civismo y política.
En Miraflores -el palacio de gobierno en Venezuela- se cumple lo que Cervantes, en su narración, planteaba en las palabras del Quijote a Sancho Panza. En otras palabras, el recinto de gobierno está ocupado por individuos que si bien han pasado por la universidad está no les ha calado en lo más somero de su inteligencia, por otros que la vida solo les ha otorgado sentimientos viles, ej.: egoísmo, envidia, venganza y pereza. Por último en lo peor del caso es que su liderazgo lo preside un individuo de suerte holgazana, con un sentido de trabajo nulo y ruin, un pasado educativo espurio.
Nicolás Maduro representa al jefe de los individuos con conductas de patanes que se identifican con la reseña de los gañanes que el Quijote afirma que por causa del asalto de piratas -en el caso Cuba y Venezuela, las revoluciones socialistas- ahora habitan los palacios. Mientras, los sabios habitan chozas.
En este panorama cruel se resalta la idea perversa del sometimiento de los pueblos mediante el control de la población con restricciones de todo tipo. El engaño, en el siglo XX y heredado en el siglo XXI ha sido la pieza clave para conseguir convencer a las masas ignorantes de civismo y política de que existe un factor fulminante para que exista el pobre, el desposeído. Este factor es la actividad de los ricos y, desde la influencia del marxismo el capitalismo.
En este Marco de suposiciones se puede observar un elevado sentido de lo absurdo e incoherente, pues, ¿cómo se le puede arrebatar algo a alguien que nunca ha poseído nada? Por ende, en tal planteamiento, donde se culpa al rico por la pobreza de otros, la lógica es inverosímil.
El ciudadano común en Venezuela, antes de la llegada de Chávez al gobierno, no solía salir a hacer turismo fuera del país, gozaba de visitar sitios turísticos bien organizados con instalaciones de excelente mantenimiento y a precios accesibles a su poder adquisitivo. Los servicios públicos: suministro de agua, electricidad, combustible para el transporte para la maquinaria pesada y la generación de energía eran óptimos y si había alguna falla está era atendida y reparada de inmediato o en el menor tiempo posible.
Las instituciones de educación pública y privada funcionaban a la perfección, tanto las de primaria como las de secundaria y Universidades funcionaban de forma excelente a causa de los presupuestos que les eran asignados con la medida de sus necesidades primordiales y una excelente contraloría pública, tanto nacional como regional. Cada estado tenía su postulado económico que se regía independientemente del presupuesto nacional.
La autonomía política, la económica y la libertad de expresión, de culto e ideológica, era el espíritu que hacía de nuestros recinto universitario el emblema de nuestra educación superior. De nuestras universidades han salido y seguirán saliendo profesionales de alta calidad y excelentes conocimientos.
No obstante, esa libertad de expresión reinante en nuestras universidades, transferidas a niveles educacionales inferiores fue el caldo de cultivo de la propaganda socialista en contra del mundo productivo, imputando al capitalismo, o sea, a una supuesta clase dominante, la culpa de que existiera una diferencia aterradora entre ricos y pobres, creando un victimismo absurdo y enajenante a la vez.
La idea de enajenar la mente del individuo de menores recursos económicos en contra de un supuesto victimario mediante la educación, fue de un resentido Social y acomplejado llamado Antonio Gramsci. Contrario a combatir lo que él llamó hegemonía cultural, su ideario marxista dio como producto un proceso de miseria donde la masa oprimida por gobiernos populistas practican una suerte de gregarismo comandado por su liderazgo acólito y sátrapa, que si reparte, pero miseria, de lo cual tiene que conformarse el -supuesto desposeído freireano- debido al miedo y el hambre que estos producen mediante la fuerza, el control alimentario y el terror de estado.
En Venezuela si ha habido despojo, pero ha sido por parte del gobierno de Maduro a las Universidades. ¡El motivo está claro, la lógica enseña que si antes del gobierno de los comunistas todo funcionaba bien en el país y ahora todo anda mal, algo debe estar ocasionando tal desbarajuste! Entonces, ¿quiénes son los primeros en advertir el déficit y su causa? ¿No son los que tienen mejor acceso al conocimiento? Por ende, los universitarios. Estos últimos se encargarían de llevar el mensaje a sus hogares y al pueblo en general. Esto es lo que el gobierno no quiere, por eso se ha encargado de acabar con las universidades mediante la restricción de sus presupuestos.
La suerte está echada con Edmundo Gonzalez de ganar las elecciones el 28-07-2027 y la Terna de María Corina Machado los sabios entrarían y habitarían los Palacios y los gañanes se tendrían que ir a habitar sus residencias obtenidas mediante la corrupción, el robo del erario público y malversación de fondos monetarios en pos de una geopolítica enfocada en el apoyo de los truhanes que usurpan el gobierno ante los organismos rectores de la política internacional.
El gobierno actual de Venezuela además de corrupto está compuesto por la combinación de insolentes, viles e ignorantes, son una suerte de truhanes y delincuentes.
Joise Morillo
Venezuela USA
Debo aclarar y corregir que las elecciones en Venezuela serán el 28/07/2024 y no el 28/07/2027, gracias y disculpen