Definición: “Dícese de aquella seudo ciencia que por imitación pretende demostrar el bien cuando la única actividad que realiza es hacer el bien pero para él mismo o sea para quien la predica, valiéndose para ello de todas sus artimañas aprendidas o creadas por sí mismo.”
Todos los habitantes del País estamos a merced de las ganas de alguien de los antojos de alguien de los compromisos de alguien sea unipersonal o no, sea corporativo o no, apostando al caballo del comisario para lograr un beneficio de Papá Estado sin importar lo que pasa a un costado.
Terminada la campaña política hacia la Presidencia ninguno de los candidatos propuso bajar la carga del Estado, ninguno propuso regularizar (¡!??) o ya bien administrar los recursos de los diferentes Poderes en que se divide el Estado, controlar el exceso de empleados públicos, control de gastos en Oficinas públicas, nada de nada sobre reducción únicamente generar gastos para “atender personas en dificultades y o indigentes” todo canalizado por un Ministerio cuyo significado es un gran agujero negro el que únicamente da apoyos (¡!??) sin contraprestación alguna.
Hacia donde nos dirigimos como sociedad?
Nos vamos en una escalada infinita en la mala utilización de los recursos estatales en pro de algo sin retorno, recursos que son finitos (no por flacos) sino por tener límites en sí mismos salvo que se continúe exprimiendo a una clase media viendo, ella misma, como se recortan sus ingresos una y otra vez.
Esto que escribo es indicativo para todos los POLITICOS EUNUCOS esos mismos se creen el ombligo del País que terminan siendo habladores de tonterías que sólo los tontos intentan deglutir, como no entienden bien se autoconvencen de que así debe ser.
Empresas que se cierran no por falta de trabajo sino que los adoctrinados laburantes siguen los designios de otros que venden ser trabajadores terminando ser aprovechadores de oportunidades ajenas brindando arengas eludiendo la responsabilidad.
Hasta cuando esto será real?, hasta que lleguemos a la arena que está al final de tobogán para, recién allí, darnos cuenta de todas las mentiras que creímos vendidas como esperanza esa vieja utopía que nunca llega o que únicamente está mediante el esfuerzo y sacrificio propio: estudiar, levantarse temprano, obtener un diploma o algo similar que diga “yo sé hacer esto” y vivir de ello más allá de la infinidad de oportunidades que se tengan y o se busquen logrando el bienestar personal.
Si la justicia social predica que todos tenemos que tener las mismas oportunidades (algo que es razonable), no todos tenemos que ser gerentes, CEO de una empresa ya que alguien debe de hacer el mantenimiento de los lugares o ya acarrear bolsas de un camión, operar una pala mecánica o brindar seguridad en locales comerciales.
A quién voté?, voté al menos malo.
Ojalá en algunas de las elecciones venideras pueda votar a aquel que sí sepa y diga lo que realmente Mi País necesita sin creerse el eje del Uruguay viendo desde un escritorio lo que los demás dicen.
Si las leyes están para cumplirlas pues entonces cúmplanlas sin hacer vericuetos seudo legales máxime cuando esas mismas leyes son ratificadas por el único soberano: nosotros los votantes.
Ramiro Gómez
098020397
