(ya pasaron 12 años)
En enero de 2011, la revuelta en Túnez generó una onda de choque en todo el mundo árabe. (“Primavera árabe»).
Hoy sólo Túnez continúa en la vía de una transición a golpes, decepcionante a ojos de la población.
En su momento fue llamada «transición democrática «.
En Occidente fue nombrada como «Primavera Árabe «, un nombre de fantasía.
Esa transición está en crisis, según Olfa Lamioum (politóloga francesa) .
Opina Lamioum: «Sus conquistas en materia de libertades individuales y derecho a la expresión están cada vez más amenazadas».
Al mismo tiempo, cuando se creía que la revolución renovaría a las elites en el poder, se está produciendo un retorno de las figuras del antiguo régimen.
Las grandes reformas económicas no hicieron otra cosa que despojar aún más al Estado de su poder de regulación social.
El reverso de esta política fue el aumento de la deuda y el aumento de la dependencia de las instituciones financieras internacionales.
Peor aún once años después de esta revolución «de la juventud «, el desempleo de los jóvenes sigue siendo estructural y masivo.
Es más de lo mismo. En Medio Oriente, cada tanto es necesario hacer algunos cambios para que todo siga igual.
Fuente Le Monde Diplomatique .
