Durante muchos, muchos años, el Partido Colorado dominaba el “Centro del Ring”. Dominaba la pelea y a los rivales de turno. Dominante neto de las contiendas políticas del país.
¡¡¡Qué paradoja!!! Ahora el ex Presidente Sanguinetti le pide al actual gobierno que allí se posicione. A pesar de que, de un tiempo a esta parte, el Partido Colorado mismo se ha corrido a las cuerdas, perdiendo el dominio de las peleas, y actualmente está en un rincón, con la guardia baja y pidiendo desesperadamente que alguien tire la toalla.
Ya no da pelea, y no sabe cómo hacerlo, perdió la memoria, y apenas atina a conservar las pocas fuerzas que le van quedando. La campana esta por sonar.
Ya hace mucho que al finalizar los actos del Partido Colorado no se grita “Viva Batlle”, ni lo hacen los que se autodefinen “Batllistas”; es más, algunos ensayan un “Viva Herrera” (en voz baja), afirmando lo que muchos dicen, que ya el Partido Colorado es más Herrerista que Herrera.
Tampoco hay nadie que “te cante la justa”, solo se atina a ensayar escusar y débiles defensas de los errores y horrores de gestión. De oros temas mejor no hablar.
La justa es conservar algún carguito, lo más que se pueda, que cada vez son menos. Y solo se conforman con ser una sucursal del partido de gobierno, siendo otrora el partido de gobierno por excelencia.
Algunos correligionarios hacen política tirándose flores, el problema que son rosas rojas y no le sacan las espinas, y crecen las intrigas subterráneas.
Otros en cambio, proclaman a viva voz “Juntos y cuanto más pegados mejor” en la coalición gobernante de turno. Antes lucían divisas diferentes y opuestas, pero en estos tiempos modernos de globalización y posverdades, vale más el sillón que las ideas, es lo que asegura el “actuar en bloque”.
Lo real es que el Partido Colorado abandonó el centro del ring.
