El Poder Ejecutivo que encabezará desde marzo Yamandú Orsi tiene prevista entre sus primeras decisiones la convocatoria a un diálogo con participación de diversos organismos y otros actores no gubernamentales para preparar una “reforma de la protección social»
El director de la OPP designado asegura que se prevé definir un “calendario razonable”, lo que para él significa “que se discuta y que se apruebe en este nuevo período de gobierno.
Estamos ante el mismo escenario vivido en el gobierno del Pepe Mujica, donde el caos económico generado fue motivo de queja hasta del mismo Tabaré Vázquez que lo heredó y no pudo arreglar.
Durante el gobierno de José Mujica (2010-2015), la relación entre la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), dirigido por Fernando Lorenzo hasta 2013 y luego por Mario Bergara, estuvo marcada por la influencia de Danilo Astori, quien ocupó el cargo de vicepresidente pero seguía siendo el referente económico del gobierno.
Astori, líder del sector Asamblea Uruguay dentro del Frente Amplio, había sido ministro de Economía en la administración de Tabaré Vázquez (2005-2010) y se mantuvo como la figura clave en la conducción de la política económica. Sin embargo, durante el mandato de Mujica, la OPP adquirió un rol más protagónico, liderado por Gabriel Frugoni y luego por Gabriel Papa, lo que generó ciertas tensiones con el MEF.
Algunas diferencias surgieron en torno al manejo del gasto público y la orientación de las inversiones del Estado. Mientras que Astori y su equipo en el MEF buscaban mantener disciplina fiscal y sostenibilidad en las cuentas públicas, la OPP, alineada con Mujica, promovía un mayor protagonismo del Estado en la inversión y el desarrollo de infraestructura, con una visión más intervencionista. Esto generó fricciones dentro del gobierno, aunque finalmente prevaleció el enfoque más moderado del equipo económico liderado por Astori.
En resumen, la relación entre la OPP y el MEF en ese período estuvo marcada por una coexistencia con ciertas tensiones internas, pero sin una ruptura abierta, ya que Astori seguía siendo el referente principal en materia económica dentro del gobierno del Frente Amplio.
Hoy no tenemos a Astori, un moderado que no cedió a las locuras económicas del Pepe, ni el FA es el mismo, dominado por comunistas y los tupamaros del MPP.
¿ESTAMOS CONDENADOS A UN ESTADO TODOPODEROSO QUE DEVORE IMPUESTOS, NOS ENDEUDE PROVOCANDO EL CIERRE DE EMPRESAS, LA PÉRDIDA DE FUENTES DE TRABAJO Y AL OSCURANTISMO QUE NOS PROPONEN COMO FUTURO?
Yo no me arrodilló, ¿Y Usted?
Roberto Alfonso Azcona