Pasó el Congreso del Partido Comunista de Uruguay y es noticia.
Es noticia porque ya dejó de ser un partido minoritario dentro de la coalición Frente Amplio – Pit Cnt, que a base de acuerdos siempre dominó la interna.
Ahora pasó a ser el neto dominador.
Es el partido mayoritario dentro del Frente Amplio, desplazando a la banda del Pepe, y como todos sabemos domina los sectores radicales y combativos del sindicalismo uruguayo.
En este congreso ya están los nombres de los negociadores, y de eso sí saben.
Lo han hecho siempre, y tienen la virtud de la paciencia.
Los moderados del Frente Amplio, y la derecha tibia y débil, juegan para ellos.
Dominan el juego político y saben mover sus piezas para generar miedo. Ese miedo que paraliza a la clase política. El miedo a perder votos y quedar afuera del juego del reparto.
El Partido Comunista va por el poder, y va por todo. Con inteligencia y paciencia, saben que tarde o temprano van a llegar.
Y saben que ya no hay Caudillos que los frene.
Ya no hay Caudillos que se la jueguen, eso es cosa del pasado. Ahora hay Caudillitos que se la creen, pero juegan para su círculo cercano, esos que los palmean, aplauden o se sacan fotos y selfies, y se favorecen con su gestión; pero la gente de a pie, es cada vez más pobre, y sus necesidades básicas cada vez más insatisfechas.
¿Cómo se soluciona ese problema? La izquierda dice que con deuda pública y que pague más el que tiene más.
¿Pero eso es lo que quiere el Partido Comunista?
Definitivamente NO
El Partido Comunista quiere el PODER y nada más. Usa a la gente para que su Nomenclatura domine los puntos de poder, pero buscando algo superior, que no es solucionarle el problema a la gente de a pie.
La pregunta hay que hacérsela al Partido Comunista que es el nuevo dueño del Frente Amplio – Pit Cnt, y que lleva a que se radicalice.