Ya no hay Izquierda ni Derecha en Uruguay, es puro Marketing.
El país sigue dividido en dos mitades como ha sido históricamente, donde un 20 % de los votantes inclinan la balanza cada cinco años. Y es a ellos que apuntan, unos y otros, en sus campañas de evangelización.
Lo que prima es el humor de la gente, según su bolsillo o la cartera de la dama. La Educación es un problema permanente y en aumento, pero no mueve la balanza. Tampoco la pobreza infantil, ellos no votan, la sufren.
Como en el fútbol, hay barras bravas que saturan las redes sociales, pensando que así se ganan los partidos, pero el inconsciente colectivo piensa diferente.
Hay un 70/80 % ya evangelizados, no importa el líder de turno, y un número variable de ateos políticamente, que no están casados con ninguno, sólo prestan el voto sin sentirse comprometidos, son los verdaderos librepensadores.
En definitiva, tenemos un régimen Presidencialista, y votamos listas sábanas sin saber quiénes están en la misma, sólo leemos el titular, y es a ese al que votamos. Sanguinetti, Lacalle Herrera, Sanguinetti, Batlle, Tabaré, Mujica, Tabaré, Lacalle Pou.
¿Quiénes serán los próximos o próximas titulares de las listas sábana?
En el último Plenario Nacional del Frente Amplio, el actual Presidente de esa fuerza confirma con sus palabras:
“Las candidaturas tienen que ser la potenciación de un proyecto político”.
“Los candidatos tienen que solidificar, fortalecer, ensanchar la base del Frente Amplio, las discusiones internas, darlas de la mejor manera para que esas discusiones que son importantes, porque ni más ni menos que uno de ellos, de nuestro punto de vista, va a ser el Presidente de la República, las tenemos que cuidar, las tenemos que procesar con delicadeza y con amor por la fuerza política a la que pertenecemos”.
Lo mismo hacen todos los partidos que integran las dos mitades, se encolumnan detrás de lideres o referentes principales, y la gente deja de leer para abajo en la lista.
¿El electorado es realmente de Izquierda o Derecha, o es Simpatizante de algunos Lideres o Referentes? Que en definitiva deriva en un Presidencialismo.
Porque hay muchas “Vacas Sagradas” que no se tocan, sean de un bando u otro los Inquilinos de la Casa de Gobierno, por más que se digan de centro, derecha o izquierda.
El pasado 30 de octubre Brasil vivió la elección presidencial más reñida de su historia, donde Lula da Silva se impuso sobre Jair Bolsonaro por apenas poco más de un punto. Ese resultado reflejó lo polarizada que está la sociedad brasileña. Todos creen que los proyectos de país de ambos son transversalmente opuestos. Sin embargo, José Roberto Tadros, presidente de la Confederación Nacional de Comercio de Bienes, Servicios y Turismo (CNC) del gigante sudamericano, consideró que no habrá cambios tan significativos como los que algunos esperan que realice el líder del Partido de los Trabajadores (PT).
“Aquí en Brasil cuando hay un cambio de gobierno, todo el mundo entra en pánico, porque el gobierno va a hacer esto, va a hacer aquello, y el nuevo gobierno no va a hacer nada nuevo. Sólo queda esto y el centro, que es el rescate de la pobreza, que es el sueño de todos nosotros, como la ha reducido el actual gobierno”.
“La democracia es eso: negociación. Si no se negocia ya no es democracia, es dictadura. Tienes que convivir con tus adversarios. El gobierno de Lula va a convivir con ellos. Como el gobierno de Bolsonaro ha pasado cuatro años en conflicto con el Tribunal Supremo Federal, en ciertos momentos con la Cámara Federal. La democracia es conflicto y diálogo”.
Preguntado cómo ve el futuro de América Latina con los recientes cambios de gobiernos en países como Brasil, Colombia, Chile y Perú, responde: “Ya no hay izquierda ni derecha. Eso es marketing. Cada político tiene su nicho de mercado. Ciertos países tienen pobreza, y explotan esa pobreza en beneficio de la política. Ahora, dictadura nunca más en América Latina. Más allá de Nicaragua, Cuba, países más grandes como Brasil, Colombia y Argentina no tienen ninguna posibilidad. Cada uno ocupa su nicho en el mercado. Es sólo marketing”.
La pregunta que queda en el aire:
¿Ya no hay Izquierda ni Derecha en Uruguay, y tenemos que darnos cuenta que es solamente Marketing puro?