Los Meta Universos, Kabul y Montevideo

0
543

Por: Anonimous.

Mis columnas tratan normalmente de temas de la realidad nacional que obran como frenos para nuestro desarrollo como sociedad. Soy un convencido que si no fortalecemos la educación para el futuro nuestros hijos nietos sufrirán nuestra falta de visión. Pero la educación es solo una arista más de un cubo mágico cuyos colores hay que descifrar y ordenar para lograr el desarrollo en 10, 20 o 30 años. Hay que tener objetivos claros, unidad de propósito, eso que se llama Estrategia Nacional y Políticas de Estado. Hoy quiero mirar ese aspecto de nuestro gobierno. ¿Qué deriva lleva nuestro barco?

Una educación dominada por el gremialismo que no está enfocada en el educando sino en sus propias reivindicaciones no nos puede llevar a construir un futuro próspero, lleno de jóvenes profesionales y técnicos que surfeen la cresta de la ola en 2030 o 2050.  Las reivindicaciones del gremialismo docente poco o nada tienen que ver con el mejoramiento del profesorado, o de las condiciones para el aprendizaje, sino que buscan generalmente afianzar y ampliar privilegios queno tienen un impactocrítico en la calidad educativa de sus educandos, sino en una acumulación de poder con fines político-ideológicos. Pero no solo la educación es el freno, la acción sindical general, que no se centra en aspectos de trabajo sino en política partidaria y además una acción política dominada por una oposición que se empeña en poner el palo en la rueda y no escatima en mentiras de todo tipo, con el solo propósito de recuperar el poder perdido, completan el panorama.

Días pasados un grupo de ciudadanos representados por Mercedes Vigil y Eduardo Abenia, se entrevistaron con el presidente para expresar mediante una carta y en persona, su deseo que la amnistía y la vuelta de la página de la historia se haga realidad cincuenta años después. Ese esfuerzo que aplaudimos como un hito y una esperanza no es el único que ciudadanos están llevando adelante para despegar de un pasado que nos paraliza y amenaza destruir nuestro porvenir. Hay una nueva asociación de familiares de presos políticos en Uruguay, que está empezando a trabajar con fuerza, reivindicando la liberación de sus abuelos. Hay también un proyecto de ley que la coalición multicolor está tratando, para permitir que los jueces puedan decidir enviar a los mayores de 65 años a cumplir prisión domiciliaria, mientras siguen muriendo los presos de las cárceles de Coraceros y de Domingo Arena, sin condena, en una virtual cadena perpetua.   Todos estos esfuerzos son muestra de que la sociedad ha despertado y quiere cambios que no siente estén encarnando en la acción de gobierno. Todavía hay confianza, pero hay una sensación creciente que el tiempo de los cambios se agota en este tema como en otros y que ya no puede esperarse más. Hay que recuperar el sentido, la racionalidad, la capacidad de decisión y acción. El mercado mundial no nos esperará.  Hoy se está abriendo una ventana de oportunidad y hay que aprovecharla y a fondo, porque hemos perdido quince años. Los jóvenes asiáticos, por ejemplo, ylos de la mayoría de los países del mundo obtienen mejores resultados que los nuestros y no solo en matemáticas, sino en lectoescritura y comprensión lectora. No hay tiempo que perder. En los 90 el profesor Rama nos quiso subir al tren y el gobierno de la Educación se lo impidió. ¿Repetiremos el error otra vez?

Hace unos meses la firma Google anunció que estaba proyectando invertir en un nuevo cable submarino que uniría a América del Norte con Uruguay, posicionando así de una mejor forma al país en el mapa tecnológico mundial. Sin duda se trata de una oportunidad de desarrollo que debería ser secundada con políticas y estrategias de Estado.  Pero, hasta donde sé, nada más se ha dicho desde junio. La realidad dinámica del presente exige aprovechar las ventajas que nos deja la realidad política y económica, se trata de explotar la educación recibida ya que nuestro tamaño relativo no nos deja espacio para errores. Y hay que hacerlo rápido porque la ventana de oportunidad en el mercado mundial es breve.

El día once de noviembre pasado tuve la suerte de encontrar entre el cúmulo de información diaria que nos apabulla y nos distrae, un artículo excepcional de Andrés Oppenheimer, publicado el seis de noviembre último en la publicación virtual ¨Nuevo Herald¨.Usaré pues esa fuente como apoyo para argumentar la urgencia de implementar políticas de Estado que nos coloquen en el concierto de las naciones que no se caerán del mapa. En ella se da cuenta de una nueva oportunidad para América Latina: Los Meta Universos virtuales

Son nuevas formas de comunicación a través de internet que revolucionarán la manera de interactuar entre los seres humanos. Allí se informa que el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, cambió el nombre de su empresa a ¨ Meta¨, prefijo latino que significa más allá de. Ese es un ejemplo de reacción temprana.  Al parecer quiere ser de los primeros en sumarse a la nueva tendencia tecnológica que cambiará el mundo, el meta universo que aún no tiene nombre propio y que algunos llaman ya:¨El Metaverso¨, o ¨meta-mundo¨, o ¨X-verso¨. Me pregunto si hay alguien integrando esta realidad a la currícula de todos los grados educativos de la educación formal: ¿quién lo está coordinando, se están redactando objetivos? Espero que sí. 

Esun nuevo mundo que cambiará internet, siendo el cambio tan radical que las formas actuales dejarán de usarse. Para Oppenheimer reemplazará al Internet tal como lo conocemos afectando las formas de trabajo y la economía.  Microsoft, Sony, Google y Apple están trabajando para crear universos digitales multidimensionales y ahora¨ Meta¨, se suma a la tendencia de los gigantes. Al parecer no habrá un solo metaverso, sino tantos millones como sitios de Internet existan. 

¨Podrás crear tu propio meta-universo e invitarme a sentarme virtualmente en tu oficina, y podremos caminar juntos digitalmente desde allí a cualquier otro lugar¨. 

Se trata de aplicaciones de los anteojos de realidad virtual que, al empuje de este nuevo uso cobrarán fuerza de cambio para, seguramente achicarse y volverse progresivamente más y más pequeños y útiles, como ha ocurrido con la industria de los celulares. La transición a un mundo digital multidimensional comenzará, como ha ocurrido antes, con la industria del entretenimiento, y después pasará a la producción de bienes digitales. Es fácil adivinar conferencias con realidad virtual o realidad aumentada, en lugar de verlos en una pantalla plana, o giras por los vestuarios de los equipos y por las ciudades cede, antes de cada partido, sustituyendo a los comentaristas actuales. Seguramente luego,podremos fabricar productos digitales educativos. Un médico podría teletransportarse a una clínica de renombre y mostrar a sus estudiantes cómo realizar un nuevo procedimiento quirúrgico con instrumentos aún no disponibles en el lugar de la clase. Este metauniverso digital llevara a la producción de cada vez más bienes virtuales, incluida la ropa digital. A medida que la economía se mueva cada vez más del mundo físico al virtual, participaremos en reuniones de trabajo virtuales o iremos a una cena de gala virtual, estando en realidad en nuestros hogares, cómodamente sentados y vestidos con ropa digital. Algunas empresas de ropa de marca están vendiendo ahora vestidos y accesorios digitales. En este escenario es probable que la producción de bienes digitales multidimensionales amplíe la brecha tecnológica entre los países ricos y pobres. Como nos pasa con Finlandia, produciremos árboles mientras ellos nos venden celulares o quizá esta vez seremos capaces de anticiparnos y crear políticas de Estado que nos ayuden a vivir un futuro menos dependientey más próspero en treinta años. Es cierto que somos un país tomador de políticas, pero eso no implica que debamos desde ya resignarnos a ser los talibanes del futuro cabalgando la ruta del opio porque la geografía nos favorece. 

Vivek Wadhwa es un futurólogo de Silicon Valley que ha escrito varios libros sobre las próximas tecnologías. Este autor sostiene, según Oppenheimer, que los metas universos virtuales, permitirán a las personas trabajar desde cualquier lugar del mundo. Ésta podría ser una gran oportunidad para que América Latina reemplace a China como la fábrica del mundo. Pero Wadhwa no se queda allí, él agregaque, así como América Latina se perdió la oportunidad de convertirse la oficina de soporte administrativo del mundo cuando apareció el Internet, puede perder la oportunidad ahora de convertirse en la fábrica del mundo con el Metaverso. “El problema no es la tecnología”, dijo Wadhwa. “El problema es la falta de visión y capacidad de América Latina para aprovechar las oportunidades”. Deberíamos tomar nota de lo que dice Vivek.

No es difícil entender los que nos dice Wathwa cuando asistimos a una oposición como el Frente Amplio que no escatima mentiras con tal de poner el palo en la rueda al país. Una oposición que amenaza con paralizaciones masivas, que se alía con el movimiento sindical y eleva a uno de sus máximos dirigentes a la categoría virtual de presidente de dicha coalición de izquierdas, dando un espaldarazo a esos procedimientos que nada tienen que ver con la excelencia que el mundo nos demanda y nos exigirá cada vez más.

En su nota Oppenheimer le pregunta a un empresario de los metas universos acerca de que recomendaría a los presidentes de América Latina para ayudarlos a no perder este nuevo tren de la historia.  

¨Efectivamente Rony Abovitz, fundador de la empresa de realidad aumentada Magic Leap, dijo que les aconsejaría que construyeran una buena infraestructura de Internet rápida, enseñen a los niños de sus países a codificar, y ayuden a que sus empresas encuentren un lugar en las nuevas cadenas de suministro de productos digitales. Si no se suben a esta ola ahora, “empezarán a parecerse cada vez más a Afganistán

En estos y otros temas es hora de poner manos a la Obra.

Fuentes:

DEJA UNA RESPUESTA

Semanario ConTexto promueve el respeto entre las personas, y fomenta los valores Éticos y Morales de una buena convivencia. La redacción bloqueará los mensajes con palabras o expresiones ofensivas, denigrantes o insultantes. Por un Uruguay mejor. Gracias por tus comentarios

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí