¿SE QUIEREN DAR UN TIRO EN EL PIE? PARTE 2. Por Daniel García

La semana anterior, hicimos un artículo donde analizamos una parte del programa del Frente Amplio, en el cual nos remitimos a algunos aspectos relativos a la seguridad.

Continuando con el análisis, el cual podríamos comparar con una especie de autopsia del programa, que en su definición significa “ver por uno mismo”, lo que requiere que entonces miremos adentro.

“Un país de Bienestar para todos y todas”, nos anuncia el programa, en el lenguaje llamado inclusivo, tediosamente usado a lo largo de todas sus páginas.

“abordar los problemas de la desigualdad socio-económica en un sentido integral, reconociendo especialmente el papel de las clases sociales, el género, las generaciones y las culturas e identidades en su diversidad. Para ello, es imprescindible llevar adelante políticas que prioricen la redistribución de la riqueza, dando prioridad a quienes se encuentran en situación de mayor vulneración social, como son la indigencia y la pobreza infantil como emergencia nacional prioritaria inmediata, lo que implica enfrentar de manera directa la desigualdad y la exclusión”..

Entiendo, como describíamos la semana anterior, que cuando se parte de premisas falsas, arribamos a conclusiones erróneas.

La izquierda promueve e insiste con una mirada sesgada, donde involucra al género como causante de desigualdades, de ahí que propongan soluciones artificiales, para igualar esas diferencias, por lo cual terminan imponiendo leyes de cuotas, leyes desnivelantes a favor de la mujer, solo por serlo, u otras a favor de ciertos colectivos.

Otro item con el que inundan el espectro, se refiere a la famosa “redistribución de la riqueza”, un viejo paradigma seductor, que le hace creer a mucha gente, que este tipo de gobiernos vendrá con su espada justiciera a distribuir entre todos esa riqueza.

Para ello recurren, a nombrar a los que están en mayor vulnerabilidad social, indigencia o pobreza infantil, asegurando que volcarán recursos en atender esto.

¿Entonces? Primero es más de lo mismo, sin innovación, repartir dineros, planes, ayudas, como se quiera llamar, lo que, si asegura, más generaciones de dependientes eternos de la ayuda estatal, lo cual es lo mismo que decir, me aseguro mi clientela de votantes.

Pero, además, ¿qué antecedentes tenemos de esto?

“Durante los gobiernos frenteamplistas se realizaron grandes reformas estructurales acompañadas de un importante incremento de la dotación presupuestal del gasto público social”. Así lo dicen en su programa y agregan:

“En un sentido inverso, en estos últimos años de gobierno de la coalición de derecha se produce un gran retroceso, la pobreza aumentó y continúa teniendo cara de mujer y de niño y niña”. Como se ve, además, ese innecesario lenguaje, en fin.

15 años de gobierno, dejaron como saldo, más de 600 asentamientos y unos 200.000 compatriotas viviendo en la pobreza, por ende, los niños de ese entorno también, que además es donde se dan las más altas tasas de natalidad. Nos aportan su visión:

Acciones prioritarias: 1. “Desarrollar una estrategia integral de apoyo a las infancias y adolescencias con la finalidad de que ningún niño ni niña transite etapas fundamentales de su desarrollo en hogares con carencias críticas. Esto implica una fuerte inversión en políticas públicas con impacto específico y transferencias monetarias para estos hogares tomando como base las actuales Asignaciones Familiares del Plan de Equidad”.

¿Queda claro verdad? Transferencias monetarias, estimado lector, o sea dar dinero sin ton ni son, que es lo mismo que clientelismo político, o sea, comprar votos con su dinero y el mío, con las negativas consecuencias de perpetuar esas condiciones in aeternum.

Siguen: “Se mejorará la distribución del ingreso y la riqueza en base a criterios de equidad y justicia social” ¿y de qué forma? “Se hará un ajuste importante en la distribución del ingreso sin que esté necesariamente condicionado por el desarrollo de la productividad en una primera instancia” …

O sea, ellos serán quiénes determinarán, la distribución del ingreso, según criterios de equidad y justicia social, con un ajuste importante en la distribución, sin que esté condicionado por la productividad. El que quiera entender, que lo haga…

¿Le quedó claro? Yo me pregunto, en base a los candidatos y quiénes están atrás en respaldo, o más bien en conducción. ¿será la equidad y justicia social del MPP, antes MLN Tupamaros, que como Robin Hood robaba a los ricos para repartir a los pobres?

¿O tal vez sea la equidad y justicia social que aplica el Partido Comunista, confiscando propiedades, o como pretende hacer con el ahorro de miles de uruguayos de las AFAPS?

Pero demás, para desterrar dudas sobre la visión internacional, obediente que la izquierda asume siempre, apoya los postulados y objetivos de la Agenda 2030, que como ya hemos comentado en otras notas, tiene como consigna “No tendrás nada, pero serás feliz” y allí se despachan: “Se propone ratificar el compromiso del país para erradicar el hambre en el año 2030, tal como lo establece el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 (ODS) de Naciones Unidas (HAMBRE CERO)”. ¿Qué lindo verdad? Ojalá todos seamos buenos y vivamos en Disneylandia… ¿Quién está en contra de esto?

Pero como usted, aún no se convence, de lo que aquí estamos comentando, alertando sobre lo que se viene, le agrego sabor a esta nota y le aviso que viene más Estado:

“Priorizar la expansión de los bienes y servicios públicos fundamentales para el bienestar y la integración social, así como su descentralización” … Para lo cual:

“Desplegar una Estrategia Nacional de Desarrollo a largo plazo, lo que conlleva retomar la planificación estratégica por parte del Estado sobre la base de las actuales empresas públicas” …

No lo digo yo, ni es mi parecer, es bien claro, el instrumento de valerse en planificar el desarrollo, en base a las empresas públicas, asegura el estancamiento, cuando el verdadero motor, es estimular y apoyar al sector privado, la libre iniciativa, que es quien puede generar empleos genuinos, en lugar de más estado, que es igual a más impuestos.

Tenemos ejemplos cercanos, como el que nos desnuda Argentina, quien aplicó durante años un modelo de brutal expansión estatal, que destruyó riquezas, generando y provocando más de un 50% de su población viviendo en la pobreza.

Yo diría, que no se puede ser tan terco, desconocer la realidad y seguir atrás de “cantos de sirena”, seductores, demagógicos, que nos dejan parados en el medio de las arenas movedizas y todos sabemos lo que sucede entonces.

A los pre candidatos del Frente Amplio los consultan sobre los impuestos y el sistema tributario en general, Orsi como de costumbre no define nada, dice que “ni afirma, ni niega”, pero el programa es más preciso y definido:

3. “Avanzar en la transformación del sistema tributario reduciendo impuestos al consumo y fortaleciendo la imposición a la renta, el gran capital y el patrimonio con el criterio de progresividad. Con el objetivo de avanzar en la reducción de la desigualdad, estudiar las formas para incrementar el aporte fiscal por concepto de dividendos y utilidades, así como los patrimonios y las transferencias patrimoniales de muy alto porte y los depósitos en el exterior. Las modificaciones en la política tributaria tendrán como concepto que paguen más los que tienen más riqueza y más ingresos” …

Y nos aclaran en el capítulo llamado 6) Estado e institucionalidad para el desarrollo.

2. “Las empresas públicas serán un pilar estratégico del modelo de desarrollo productivo” …

Amigo lector, para que no queden dudas, el Frente Amplio, en consonancia con su permanente discurso, al igual que su sucursal, o tal vez casa matriz, que es el PIT. CNT., hablan claramente que su apuesta, que su creencia, es aumentar el peso del Estado, lo que, para solventar tal proyecto, inevitablemente, deberán meterle la mano en el bolsillo.

Como quedó explícito en lo anteriormente detallado, del mismo programa, si usted tiene su patrimonio, su capital, entonces prepárese, porque está en la lista de los elegidos para que Bergara, Oddone o tal vez Olesker, sean los ejecutores del plan, para conseguir los dineros que hagan posible, los repartos, rescates de pobres, excluidos, entre los cuales están los grupos afro. LGBT y tantos otros colectivos nombrados en el programa

¿Pero usted piensa que exageramos o que en definitiva no le va a tocar?

Recuerde el año 2007, Astori con su aplomo de profesor, su flequillo y su seductor discurso, aplicó sin despeinarse el IRPF, lo volvió a ajustar, implementó el ilegal IASS, cuando se determinó que era inconstitucional en los jubilados, para lo cual solo inventaron lo mismo con otro nombre y hoy están vivitos y coleando y ¡vienen más!

La dosis de más sopa sigue y lo recordamos por si ya se olvidó: 3. “El Estado jugará un rol igualmente fuerte en la regulación de sectores económicos claves”, lo están diciendo fuerte y claro, cuál será el rol del Estado en la economía en general.

En fin, a buen entendedor pocas palabras bastan, reza el dicho popular, el cual podemos utilizar en lo que intentamos transmitir, donde tomamos lo que el propio programa detalla en más de cien páginas y que según las propias autoridades de la izquierda llevó muchos meses de trabajo.

Pensamos, que las propuestas aquí analizadas, nos ponen frente a alternativas de un seguro fracaso, como le gusta referirse hoy al Frente Amplio sobre el gobierno.

Pensar en más Estado, en seguir repartiendo dineros a aquellos necesitados, sin pensar en otras soluciones, con un seguro ajuste tributario, para extraer recursos de los que trabajan, el camino fácil y seguro, es apostar a estancarnos.

Dividir más la sociedad, con criterios de grupos o colectivos a los que se pretende victimizar y a quiénes se busca favorecer con cupos y recursos de todo tipo.

Solo estamos alertando, para evitar que el ciudadano se equivoque, seducido por propuestas que no son profundamente analizadas, o no se vislumbra muchas veces, que consecuencias pueden tener la implementación de determinadas acciones.

Y si con toda la información que presentamos y desgranamos, algunos igual piensan que le pueden dar el voto a la izquierda, entonces me tengo que volver a preguntar, ¿se quieren dar un tiro en el pie?

Daniel García