Si uno maneja los conceptos de análisis del mundo occidental, resulta difícil entender la situación de los países de Medio Oriente,en especial Irak, país invadido por Estados Unidos en 2003 por ser uno de sus objetivos en la lucha contra el terrorismo internacional, descuidando Afganistán,de donde debió retirarse en una vergonzosa desbandada.
Respecto a Irák, Estados Unidos esgrimió como causa el presunto apoyo de Hussein a organizaciones terroristas como al- Qaeda pero una fue la causa clave: la supuesta existencia de un arsenal de armas de destrucción masiva (químicas, biológicas y nucleares)en Irak.
Por otro lado Estados Unidos, buscó consolidar su poder en una zona crítica desde el punto de vista estratégico y evitar que su dominio fuera disputado por otros potencias.
La invasión llevó a la rápida derrota de las fuerzas iraquíes y al derrocamiento, captura y ejecucion del presidente Sadam Husein.
La coalición dirigida por los Estados Unidos en el Irak ocupado trató de establecer un nuevo gobierno democrático. Sin embargo, poco después de la invasión inicial, la violencia contra las fuerzas de la coalición y entre los diversos grupos étnicos dio lugar a una «guerra asimétrica» de la insurgencia iraquí, la guerra civil entre sunitas y chiitas iraquíes, y las operaciones de Al-Qaeda en Irak.
Las grandes potencias occidentales cometen siempre el mismo error en su afán de conquistas.Van en busca de «terroristas» ( que los hay) pero no entienden que lo predominante son los «insurgentes «.
La insurgencia como tal es un mal endémico en esos países y eso da lugar a la permanente formación de fuerzas irregulares que fundamentan su fuerza, no en la disciplina o tipo de armamento,sino en sus profundas convicciones religiosas y sus firmes lazos tribales.
No se reciben muchas noticias del Medio Oriente.No al menos de personas expertas en el conocimiento de sus intrincadas realidades internas.
El doctor Adel Bakawan es un sociólogo franco iraquí, investigador especializado en Oriente Medio.
En un artículo publicado en «Le Monde Diplomatique»,edición de octubre de 2023, titulado «El creciente peso de las milicias en Irak»,describe en forma detallada la curiosa situación política del actual Irak.
El artículo es una muy valiosa fuente de conocimientos.
Según el artículo,en junio de 2014 la ciudad de Mosul cayó en manos del ISIS.
La ubicación de Mosul es fundamental, ya que está cerca de las fronteras de Siria y Turquía, razón por la que era tan importante para el ISIS, porque le permitia el movimiento de armas ,combatientes y distribución de suministros de forma fácil y sin tantos obstáculo. Recuperar Mosul era cortarle la entrada fácil al ISIS a las fronteras de países clave.
Asi entonces las autoridades religiosas iraquíes llamaron a la movilización militar contra dicha organización terrorista.
En respuesta, miles de jóvenes se unieron a las milicias que se fornaron en todo Irak.
Ninguno ingresó al Ejército Nacional Iraquí,carente de credibilidad a esa altura.
Así nació, según el autor, la organización «el Hashd», apodada luego «la nueva Guardia Republicana».
En la actualidad, «el Hashd» cuenta con 238.075 hombres con un presupuesto gubernamental de 2.650 millones de dólares.
El autor del artículo explica como una agrupación de milicias pudo alcanzar dicha dimensión y tanto peso en las finanzas públicas.
Para el poder que se instaló luego de la caída de Hussein, » el Hashd es actualmente una garantía de supervivencia».
El gobierno dictó una ley y estableció un marco jurídico que otorga a dicha milicia el rol de «protector del gobierno» y es un órgano oficial del mismo.
El Hashd no es una entidad homogénea. Se divide en tres ramas centrales, cuyos intereses resultan a veces opuestos.
La primera rama se alinea con Irán y actualmente controla la coalición.
La segunda rama se identifica con una autoridad religiosa encarnada por Sayyid Ali Husaini Sistan , un líder musulmán iraquí de origen iraní, Gran Ayatolá de Irak desde 1993.
La tercera rama adopta el nacionalismo iraquí como línea política.
Además de esas tres grandes divisiones existen pequeños grupos armados sunnitas (Irak es chiita) y otros de las minorias cristiana,yazidi,chabaquies y otras.
Se asocian según convenga a alguna de las tres ramas citadas, en particular la proirani,la más poderosa.
Las tres facciones intervienen en la vida partidaria del país. Ocupan bancas en el Parlamento,
ingresan al gobierno y participan en la toma de decisiones de alto nivel.
Por otro lado,» el Hashd» se beneficia de una recaudación ilegal de impuestos sobre las mercancías importadas por Irak.
También se benefician del contrabando de petróleo desde y hacia Irak.
En fin,el autor finaliza su artículo con una muy interesante conclusión: «La percepción muy común en Occidente, según la cual no se trataría más que de una coalición de milicias, es cada vez menos adecuada».
«Esta organización tiene una base social,brazos armados, representantes políticos y medios financieros.Mientras más pasa el tiempo, más difícil resulta expulsarla y menos aún
eliminarla».
Yo recomiendo la lectura del artículo original del doctor Dr. Adel Bakawan ,una pieza de erudición que muestra que Occidentes es una cosa y Oriente otra muy distinta.
Tilio Coronel.
