Desde la complicidad del discurso del obelisco de 1985, todos juntos proclamaron la venganza sin fin a honestos ciudadanos, militares y civiles, últimos representantes de una raza que lucho contra el marxismo…pero ya no tiene relevo.
Esta semana que paso, una impactante noticia surgida desde la vecina orilla, que debería haber sacudido el verano, a la clase política y estallado en los medios de comunicación, simplemente ha quedado oculta por las intrigas cortesanas de la trama del caso guardaespaldas.
Fue detenido en Módena Daniel “El Loco” Cherutti – hermano del actor y humorista argentino – como autor de los asesinatos de Héctor Gutiérrez Ruiz y Zelmar Michelini el 20 de mayo de 1976. Crímenes que por todos los medios de adoctrinamiento son atribuidos a los militares y por los que han muerto ya compatriotas y otros aun hoy siguen purgando penas de cárcel en D. Arena.
Por estas muertes, todos los 20 de mayo, han habido recordatorios con marchas de la memoria, organizadas por un conglomerado de ONG marxistas, en complicidad con políticos de los partidos tradicionales, que reviven esa falsa versión, al igual que la de los casi 200 desaparecidos, cuya inmensa mayoría, también está probado, perecieron como consecuencia de operaciones de inteligencia antiterroristas de servicios extranjeros fuera del territorio nacional.
Año tras año, en esa fecha, se redita el escarnio a nuestras Fuerzas de Seguridad, justamente tomando como referencia el falso relato que hace décadas acusa al gobierno uruguayo de la muerte de estos dos representantes de la clase política uruguaya.
Una clase que, en aquella época, no solo fue la responsable del colapso de las instituciones, sino que también, como esta probado por testimonios de sus propios familiares y documentos desclasificados del Departamento de Estado de los EEUU, fueron cómplices de las organizaciones guerrilleras marxistas que una vez replegadas a la Argentina, operaban junto a los grupos terroristas de la región, coordinados por la Junta Coordinadora Revolucionaria.
Así que esta información, que debería haber conmovido los círculos políticos y la prensa, porque verdaderamente desnuda al rojo vivo el falso relato, hasta hoy ha sido olímpicamente ignorada.
Ahora, la pregunta es: ¿Qué medidas de reparación podrán rescatar la dignidad de aquellas personas falsamente acusadas y juzgadas en Uruguay por esos crímenes? ¿De qué manera aquellos actores del sistema político, que hoy se erigen mártires de aquella misma democracia que ultrajaron, devolverán el honor a quienes ya han muerto en prisión por estas causas? Y finalmente ¿De qué modo los propios Partidos Tradicionales resarcirán a los miembros históricos de sus propias colectividades deshonrados con esta mentira?
Colectividades coloradas y nacionalistas que en el pasado han sido orgullosas forjadoras de nuestra democracia, y obedeciendo sumisamente al falso relato marxista también encarcelaron, repudiaron, excomulgaron y han borrado de sus registros históricos a virtuosos lideres de sus propios partidos.
Cientos de brillantes blancos y colorados que integraron el gobierno de la llamada dictadura militar, como el ex senador del PN el Dtor Martin Echegoyen, el Dr Alberto Demicheli (PC), el Dtor Aparicio Mendez (PN), Álvaro Pacheco Sere (PC), Walter Ravena (PC), Justo Alonso (PN), Juan Carlos Blanco (PC) , Alejandro Rovira (PC), Moises Cohen (PC), Alejandro Vegh Villegas (PC), Benito Mederos (PN), Estanislao Valdez Otero (PN), Jose Enrique Etcheverry Stirling (PN), Edmundo Narancio, Francisco Mario Ubillos, O Fernando Bayardo Bengoa. Por nombrar apenas algunos de los destacados lideres de los Partidos Tradicionales que ocuparon los diferentes ministerios, sin contar las trece intendencias gobernadas por civiles, los entes y servicios, los bancos estatales, la enseñanza y todo el aparato administrativo del estado que gobernó uno de los periodos más prósperos de nuestra historia.
Ellos, en lugar de ocultarse a conspirar o darse a la fuga para seguir una sorda guerra de venganza contra la patria, prefirieron asumir su responsabilidad histórica e integrar un gobierno, que nos salvó de ser una Cuba marxista.
Esos ilustres ciudadanos, formaron parte de las últimas generaciones de políticos adonde hubo códigos de Honor. Adonde sentir mancillada la honorabilidad, era una afrenta que ofrecía la elección de limpiarla en duelo de caballeros. Hoy cosa banalizada por la cobarde cultura progre de ¨cómo te digo una cosa te digo la otra¨.
Fueron los últimos representantes de una raza política admirable que colapso con el arribo del progresismo, cuya real trascendencia en nuestra vida política, es que a consecuencia de su llegada en 1971 con la creación del FA, la Suiza de América, el ejemplar país con los partidos tradicionales más longevos, padeció la creación de una coalición de izquierda, que siguiendo las directrices del partido comunista de la URSS a todas sus filiales en el mundo, fue específicamente diseñada para constituirse en la fachada política de los grupos terroristas.
Un nuevo ataque comunista a la Nación, sirviendo de pantalla legal a los subversivos, mientras estos atacaban las instituciones republicanas siguiendo la doctrina de Cuba.
Esto que en su época fue ampliamente conocido por todo el espectro político, hoy permanece sistemáticamente oculto detrás de una predica irreconciliable, por parte de aquellos que se alinearon detrás de su falso relato iniciado en el obelisco en 1985, proclamandolos ¨dignos luchadores sociales privados de su libertad a causa de sus ideales democráticos¨.
Entonces… ¿Como es posible esperar que la clase política de hoy haga frente a la mentira y a la corrupción con determinación, si desde que llegaron sus nuevos correligionarios marxistas del frente político subversivo en el 71 esos antivalores fueron incorporados a la cultura del factor político?
El caso emblemático con el que hoy comenzamos nuestra columna lo confirma en forma indiscutible:
La negociación del presidente de la Cámara de Representantes con los tupamaros por el oro robado a los Mailhos para mantener el diario El Debate del PN, que finalmente, junto a su colega Zelmar Michelini , les costaría la vida a manos de las mafias paramilitares argentinas, confirmado esta semana con la captura de su asesino en Italia.
Simplemente, al igual que ocurrió con la nueva táctica de la guerra sucia adoptada por los servicios de inteligencia contra los terroristas, aquellos políticos adaptaron esa cultura, normalizando la mentira y la indiferencia por cualquier código de honor.
Con la gran diferencia que las tácticas militares fueron excepcionales para ganar una guerra sucia acorde al mandato constitucional, y sin embargo la cultura de la clase política, internalizo esos antivalores como práctica común hoy día.
De otro modo no tendría explicación alguna los silencios ante la mentira, la violación a la constitución de la república, el prevaricato de la justicia y la inquisición de esta clase política contra quienes consideran sus enemigos del pasado. Tanto aquellos civiles, grandes estadistas políticos, como heroicos policías y militares que enfrentaron aquella guerra sucia con valor y dignidad.
Sr Cnel. Don Arquimedes Cabrera: Habría que realizar un proceso jurídico contra quienes acusan a otras personas (militares, policias, civiles, etc) de realizar esos homicidios. Supongo, que ya estará en marcha esa denuncia, con todo lo que conlleva como resarcimiento moral, económico, etc. Felicito al Sr Cnel Don Arquimedes Cabrera por esa nota periodistica, poniendo una vez de manifesto, la lucha constante por la verdad y la justicia.
Excelente nota del Cnel. Arquímedes Cabrera.
No solo la clase política no dice nada sobre este tema, sino q tampoco el periodismo le dio importancia alguna.
Y estamos hablando q las FFAA fueron acusadas de esos homicidios; y nada mas lejos de la verdad de lo sucedido.
Cuanta verdad no asumida por la clase política
Totalmente de acuerdo y si en la redes he expuesto la necesidad de denunciar todos los funcionarios judiciales que hayan condenado a militares muy por fuera del marco de los principios grales.derecho.s. Saben bien que ante la duda es beneficio del acusado, pero además siendo la ley interpretativa no ajustada a derecho, tienen otras fuentes a recurrir y puedo seguir…..y hago un llamado a que juristas den explicacion del y los hechos, en cadena de TV y medios públicos…..esto compromete y humilla al pueblo uruguayo. Y espero que salga en medios internacionales el uso y abuso de la justicia por la ideología narco- marxista y asociados.
Y explique como en estado de derecho ( supongo ) la justicia la gobierna la ideología narco- marxista preparada para tomar el gobierno nuevamente.
Los referentes del momento no somos jóvenes pero si republicanos con estado de derecho…..ciudadana común y ex- estudiante de derecho y derecho interncnl. RRII. LAS FFAA son una institución de la República. El MLN y asociados son y fueron delincuentes.
Y adhiero a cuestionar el sistema político, aunque los reivindico siempre con las reformas que deben tener y sincerarse frente a su gente
Saluda al cnel.y felicita el artículo. Es hora de salir a los medios y por cadena…