ANIVERSARIO DE LAS PIEDRAS….QUE SIGUEN CAYENDO…

Obvio que en un nuevo aniversario de la gran Batalla de Las Piedras, su título lo utilizamos para referirnos a una triste realidad.

Lunes de noche en Canal 4, programa A Dos Voces, tema un nuevo aniversario de la “Marcha del Silencio”, actividad promovida por familiares de los denominados “desaparecidos”.

El panel de costumbre y dos invitados, el Sr. Errandonea como familiar de los llamados desaparecidos y el Sr. Juan Martín Posadas, que en realidad no me quedó muy claro a que se debió su presencia e invitación, representando a la nada.

Estos programas donde el tiempo siempre apremia y es difícil exponer con detalle los argumentos, hubo que soportar un gran desconocimiento así como tergiversación de la historia verdadera.

De entrada, se entrevista a la Sra. Matilde Rodriguez Larreta de Gutierrez Ruíz, quien casi no puede hablar por notorias dificultades, pero en el raconto histórico que desarrolla, menciona que entre el año 1968 y 1973 el Estado no actuó legalmente.

¿De dónde sale esa afirmación tan contundente y a que quiso referirse con tal aseveración?

Obviamente que a nadie inmutó, ni al periodista, ni al panel.

Parte del relato que se ha inculcado en los últimos años, diciendo que la dictadura comenzó en el año 1968, es una gratuita afrenta al gobierno ejercido por el Presidente Pacheco Areco, quien tuvo que lidiar con el accionar guerrillero de esos años, con muertes, secuestros, robos, debiendo de utilizar las Constitucionales Medidas Prontas de Seguridad para frenar el caos reinante. Se trata de un gobierno totalmente legítimo y democráticamente elegido. Hay que decir las cosas como son, las medidas prontas de seguridad, por ejemplo, fueron aprobadas por 97 en 128 legisladores. Si esa no es una votación legítima no se cuál puede serlo.

Como es un tema que le “quema” a mucha gente, lo mejor es ponerse en la posición neutral y declarar la congoja por el tema en cuestión, que horrible por los familiares y los consabidos discursos de quien quiere ser políticamente correcto. Triste espectáculo de tinte derrotista, de quién oculta su verdadero sentir para quedar bien. Y la gente lo percibe.

Ni por asomo cuestionar nada, en este caso el accionar terrorista, o preguntar que cosa hacían estos familiares tan preocupados hoy en día, cuando sus familiares operaban en la clandestinidad, colocaban bombas, acribillaban gente por la espalda, se escondían en las cloacas de Montevideo, robaban bancos y tantas otras acciones para el recuerdo del terrorismo que desplegaban.

En estos días, se acaba de publicar un recomendable y excelente libro titulado ‘Operación Verdad’ del escritor Álvaro Alfonso, donde se muestran con testimonios de protagonistas, todo lo referido a lo previo de los plebiscitos por la Ley de Caducidad y tantas otras acciones relacionadas con este asunto, que debería ser lapidario para quienes quieren seguir siendo mercenarios con los sentimientos o dolores genuinos por las pérdidas ocurridas.

Siempre digo, que aún no se contó toda la verdad, quedan cosas por denunciarse y descubrir, ya que una sola campana hace años que suena, repitiendo un relato mentiroso e interesado, que ha provocado un conocimiento falseado de lo que sucedió.

El Sr. Errandonea habló de lo que quiso y como quiso, sin que nadie tuviera capacidad de refutar o contradecirlo. Ni siquiera el Sr. Faig, quien terminó de decepcionarme, pudo exponer su postura, tibia por cierto, cuando quiso decir algo cierto, que no todos los desaparecidos fueron en Uruguay, ya que la mayoría de esos casos sucedieron en Argentina.

Había un tema a tratar, que era el proyecto de Cabildo Abierto sobre la prisión domiciliaria para los detenidos mayores de 65 años. ¿Invitados de Cabildo Abierto? Nadie. Eso es un sesgo evidente y huele a servicio periodístico. Repugnante.

Con total liviandad y sin análisis, discusión, ni detalles, todos dieron por malo el proyecto, demostrando celeridad en dejar establecida su disconformidad con el mismo. Parecía un linchamiento mediático.

Una muestra de la pobreza que la Coalición expone, fue la intervención de Laura Raffo, quien rápidamente mostró su desacuerdo, diciendo que los presos políticos que ostenta este gobierno, aunque el Ministro García lo niegue, están bien juzgados y detenidos por delitos de “lesa humanidad”, además que entiende que personas de 65 años pueden estar activas y sanas aún.

Es tan cobarde como ignorante en su argumento, la ex candidata, que es capaz de soslayar, que los presos políticos que mantiene este gobierno, cuentan con edades que superan los 75 y llegan hasta los 91 años de edad, que algunos están enfermos de gravedad, sin haber sido condenados, sometidos por supuestos delitos comprendidos como de “lesa humanidad”, que en el. País son aplicables para hechos posteriores a 2006.

Todos los panelistas se opusieron al proyecto, parece que todos desconocen los porqué están detenidos, todos desconocen la no retroactividad de las leyes, que el famoso Estatuto de Roma, comenzó a regir en Uruguay a partir del año 2006, por lo que los supuestos delitos que se le atribuyen a los detenidos, que se remontan a los años 1971 y 1972 por lo menos, están por fuera de lo que se pretende nombrar como delito y han prescrito.

El programa por lo menos, debió haber invitado a algún representante de los familiares de quienes están detenidos, que los hay y están organizados, como para dar la visión correcta y hacer conocer debidamente lo que tantos pretenden ocultar de mil formas.

¿Es algo nuevo esto? Para nada, es la constante de casi todos los programas de radio y televisión del país, donde un periodismo sesgado ideológicamente, mal informado, repite un relato que se generó por la Revolución Cultural de corte Marxista, a través de múltiples protagonistas de los movimientos clandestinos..

Esta azota al país desde hace 50 años y ha ido copando todo tipo de espacios, desde la educación hasta el fútbol, cuando ahora, hasta debemos ver, jugadores mostrando carteles de los desaparecidos, previo a un partido de fútbol, y las Instituciones violan sus fines y cometidos sin parecer inmutarse.

Estos días leyendo Operación Verdad, quedan claros los detalles previos de la votación de la Ley de Caducidad y las diferentes negociaciones, cabildeos, tires y aflojes para ponerse de acuerdo o no, en dar el voto para sancionar dicha ley.

Siempre me hago la siguiente pregunta, la primera ley que se votó casi por unanimidad en la primer sesión del parlamento elegido tras el retorno de la normalidad democrática, fue la de Amnistía General e Irrestricta para los integrantes del MLN Tupamaros, cuando algunos se encontraban cumpliendo prisión, consecuencia de los innumerables hechos delictivos protagonizados en sus incursiones con el objetivo de tomar el poder.

Presurosos, diputados y senadores de todos los partidos, levantaron su mano para votar esa ley que extinguía los delitos, sin importar su gravedad, incluyendo hasta aquellos que nunca fueron juzgados y que podrían haber hasta huido del país.

Votación esta acordada, por los políticos sin haber consultado a la ciudadanía, para saber si estaba en acuerdo con esa amnistía tan generosa.

Sin considerar, los más de 400 millones de dólares que la sociedad uruguaya ha pagado por indemnizaciones, reparaciones, jubilaciones, pensiones las que se han convertido en heredables, en una inaudita resolución del Ex presidente Vázquez, a días de dejar la presidencia, en una actitud de dudosa procedencia y legalidad en entredicho.

Que diferencia con la Ley de Caducidad, que motivó tantas desavenencias, rupturas políticas, para votarse en el Parlamento finalmente, y ser sometida luego a dos plebiscitos con 20 años de diferencia, con ratificación de su contenido por la mayoría de la ciudadanía y desconocida olímpicamente por el Frente Amplio, abusando siempre de un discurso demagógico y falso.

¿Cuál será el motivo, para que el sistema político tenga tantas aprehensiones con el ámbito militar y tanta tolerancia con delincuentes guerrilleros?

Las FFAA son de la República, son los custodios de las armas, de la soberanía nacional y a quien se recurre, como la historia indica, cuando las situaciones desbordan y superan el resto de alternativas de contención. Flaco favor le hacemos a la república al encarcelar ilegalmente a sus valientes defensores.

Llámese subversión, inundaciones, catástrofes, o limpiar la basura, como todos hemos sido testigos, las fuerzas del orden siempre están y responden con dedicación y gran entrega.

Y tanta benevolencia, así como olvido, hacia quienes atentaron contra las Instituciones, secuestraron, robaron, asesinaron sin piedad, como hechos que acabamos de recordar, con una crueldad propia de desalmados y cobardes.

Creo que se debería interpelar al sistema político, que parece busca congraciarse, ser simpático y cómplice, de aquellos que nunca los van a considerar, ni de su clase, ni los dejarán de menospreciar y hostigar como se comprueba permanentemente.

Pierden su identidad, ya que parecen querer adoptar posturas ajenas, compartir y apoyar ideas que sus orígenes y tradiciones nunca sostuvieron, en una clara violación y engaño hasta de lo que prometen a sus potenciales votantes.

Reiteramos, se debe poner en activo la Ley de Caducidad, se deben liberar a los presos ilegalmente detenidos, se debe explicar de una buena vez a la población, las razones por las que se tomarían estas resoluciones, para volver a la legalidad aplicando las normas Constitucionales, el imperio de la ley y la justicia, para estos viejos servidores de la Patria que se encuentran injustamente e inhumanamente detenidos.

La Nación debe recordar las medidas sabias que aplicó en el pasado, cuando para dar vuelta las páginas manchadas de sangre de los propios orientales, perdonó para sanar las heridas.

Es hora de que no sigan cayendo más piedras sobre los servidores públicos de la Policía y las Fuerzas Armadas, un legado Artiguista así lo impone.